El gobernador Miguel Lifschitz encabezó ayer el acto de conmemoración del 104º aniversario del Grito de Alcorta, la rebelión agraria que marcó la irrupción de los chacareros en la política nacional del siglo XX, dando origen además a su organización gremial representativa, la Federación Agraria Argentina (FAA).
El acto se realizó en la sede de la Sociedad Italiana de Alcorta y contó, además, con la presencia de la presidenta comunal de la localidad, María Eugenia de la Fuente; el titular de la FAA, Omar Príncipe, y el senador departamental, Germán Giacomino, entre otros.
En ese marco, Lifschitz pidió trabajar “por una agricultura con agricultores, y retomar la lucha y los valores” de aquella gesta. También entregó un aporte de $ 1.232.000 para la construcción de un espacio conmemorativo. Lifschitz reivindicó además la figura de Francisco y Pascual Netri, dos de los principales protagonistas de la gesta, y recordó: “Esos hombres y mujeres creían en el trabajo, el desarrollo, la cultura y la educación”.
“Santa Fe muchas veces tuvo presencia en la gran historia Argentina, pero ningún otro hecho tan vinculado con nuestra cultura agraria”, aseguró el gobernador, además de pedir “retomar la lucha y los valores de los hombres del Grito de Alcorta, quienes dejaron la enseñanza que organizados se es capaz de cambiar la historia”.
El titular de la Casa Gris valoró la labor de la FAA, la que definió como la “expresión de la lucha de aquellos chacareros”, y que hoy “representa a los pequeños productores, a los que siguen estando en el campo, y se esfuerzan para llevar adelante sus actividades”.
A su turno, Omar Príncipe reivindicó los ideales de los artífices de la rebelión, y definió a la fecha “con un cumpleaños donde se conmemora la historia de la FAA”.
“El Grito de Alcorta renueva el compromiso de mantener esta historia y arraigo; el disparador de la huelga fue la falta de justicia e igualdad”, recordó el titular de FAA.
El Grito de Alcorta fue la primera rebelión agraria que se registró en el sur de Santa Fe y que se extendió luego por toda la región pampeana. El 25 de junio de 1912 se realizó una asamblea en la Sociedad Italiana de Alcorta, de la que participaron unos 300 agricultores y entre manifestaciones combativas se declaró la huelga por tiempo indeterminado, hasta conseguir, entre otras reivindicaciones, rebaja general de los arrendamientos y aparcerías y contratos por un plazo mínimo de 4 años.
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