El titular de la Federación Argentina de Trabajadores de Industrias Químicas y Petroquímicas (Fatiqyp), Fabián Hermoso, está detenido desde este jueves en el marco de una causa por presunta extorsión que que involucra a los máximos referentes del gremio, y que ya había salpicado al secretario General del Sindicato de Trabajadores Químicos y Explosivos de Florencio Varela y ex concejal del distrito por el Frente Renovador, Miguel Ángel Soutto, y a los dirigentes Félix Rolón y a Diego Uriel Flores, quienes además están acusados de asociación ilícita.
La noticia rebotó con fuerza en el mundo gremial y especialmente en el ala oficialista. Es que Hermoso forma parte del armado sindical de Cambiemos, y está al frente la Secretaría de Acción Política de las 62 Organizaciones que comanda el líder de los peones rurales Ramón Ayala, aliado del gobierno del presidente Mauricio Macri desde los tiempos del partido FE del fallecido Gerónimo “Momo Venegas”. Ambos, Hermoso y Ayala, integraron la comitiva de 12 sindicalistas que acompañó al ahora ex secretario de Trabajo Jorge Triaca a Europa, cuando todavía era ministro, en el primer semestre de este año.
Ahora la marea se volvió en contra: según informó el sitio Infogremiales la investigación judicial avanza sobre la cúpula de la Fatiqyp: “Los aprietes no sólo caían sobre los empresarios sino también contra los empleados que no se afiliaban a su gremio”, deslizó un investigador.
Según refirió el sitio especializado, tanto Soutto como Rolón se ocupaban de visitar las empresas grandes, donde consideraban que estaba la mayor “recaudación”. En tanto, Diego Flores, con apoyo de barrabravas del club Defensa y Justicia, se encargaba de los comercios denominados “todo suelto” -que ofrecen productos como lavandina y detergente a bajo costo– donde bloqueaban los ingresos.
Hermoso aparece en esta trama como “garante de impunidad”, según la investigación.
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