El policía acusado de matar por la espalda a un adolescente de 17 años el martes pasado en el barrio Guadalupe de Santa Fe quedó detenido con prisión preventiva luego de una audiencia de medida cautelar donde se dictó su encarcelamiento por el plazo de ley, ya que el delito por el que está señalado prevé prisión perpetua.
Así lo dispuso este fin de semana la jueza Rosana Carrara a raíz del pedido formulado por los fiscales Ezequiel Hernández y Martín Torres contra Francisco Aldo Olivares, imputado de los delitos de homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por haber abusado de su función como miembro integrante de una fuerza de seguridad.
Según voceros judiciales, el crimen de Lautaro Joaquín Saucedo, de 17 años e hijo de un policía, quedó registrado en cámaras de seguridad del barrio Guadalupe el martes a las 10.30. Según las imágenes, corroboradas por testigos según la Fiscalía, Lautaro intentó sacarle la bolsa a una mujer mayor sin éxito, y cuando se iba, la señora le entregó su monedero con lo que el joven se alejó a pie. En esos momentos, Olivares, quien vestía de civil porque se encontraba realizando una custodia irregular, le disparó por la espalda sin dar la voz de alto ni identificarse como policía.
“Si bien la defensa del imputado hizo diversos planteos técnicos acerca de la calificación penal que atribuimos y de la calificante, la jueza resolvió ordenar la prisión preventiva”, dijeron los fiscales Hernández y Torres. Agregaron que el imputado “declaró y dio su versión de lo ocurrido”.
Desde un principio, la Fiscalía enmarcó el crimen en un caso de gatillo fácil. Durante la imputación realizada el jueves, Hernández y Torres acusaron al subcomisario Olivares de tomar posición de disparo y apuntar contra Saucedo cuando corría de espaldas a unos 50 metros, logrando herirlo en la zona lumbar, lo que le costó la vida cinco horas después.
“Su accionar fue con alevosía y abusando de sus funciones”, dijeron los fiscales al resaltar que el joven se encontraba desarmado y de espaldas. Según la acusación Olivares “actuó sobre seguro, en forma arbitraria y violando los deberes propios de su función de miembro integrante de una fuerza de seguridad”.
El accionar del policía fue en respuesta a un intento de robo. Según la Fiscalía, el adolescente le quiso robar una bolsa a una mujer de 73 años que caminaba por la vereda. “Dame la bolsa”, le dijo a la señora que como no llevaba nada de valor le ofreció su monedero.
En ese sentido, los fiscales hicieron hincapié en que “el joven fallecido no cometió el robo. Si bien comenzó a desplegar su accionar tendiente a desapoderar de una bolsa que tenía una mujer que caminaba por el lugar, él mismo desistió de cometer el ilícito ante la resistencia de la señora. Más aún, cuando se estaba yendo, la mujer lo llamó y le dio dinero” de su monedero, aseguraron.
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