El conductor del auto que el pasado 31 de diciembre chocó y mató en la ruta provincial 18 a la motociclista Ana María Altamirano quedó preso por el plazo de ley tras ser imputado por homicidio culposo y falsa denuncia. Así lo dispuso este miércoles el juez Ismael Manfrín en el marco de una audiencia imputativa. “Volqué. ¿Si voy y denuncio que me robaron? ¿Zafa?”, aseguran que texteó Diego Hernán Ureta, el acusado de 40 años, luego de volcar el Peugeot 408 que recién fue hallado el sábado por la noche en Soldini, cuando los familiares la mujer comenzaban a movilizarse ante la falta de respuestas.
Eran poco más de las 22 cuando Ana Altamirano circulaba por la ruta 18 con intención de celebrar la llegada del año 2022 en barrio Puente Gallego. Cuando apenas quedaba un kilómetro, un auto blanco embistió la moto Gilera de 110 centímetros cúbicos despidiéndola. El conductor no le brindó auxilio sino que la dejó abandonada a la vera del camino. El sábado por la mañana Ana murió en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez producto de un traumatismo de cráneo.
Ese día, el hallazgo a las 22 de un 408 blanco estampado en una zanja de un camino que une Rosario con Soldini echó una pista sobre un posible conductor. Sobre el vehículo pesaba una denuncia por robo, asentada a las 3 de la mañana del 1° de enero, reconstruyó el fiscal Marcelo Vienna. Según el titular registral, quien se dirigió a la comisaría 19ª, lo habían robado de levante en la zona de Castellanos al 4000 en pleno festejo de Año Nuevo.
Entretanto, hubo manifestaciones en Puente Gallego para pedir el esclarecimiento del caso. Las medidas de investigación condujeron a la detención en las últimas horas del fin de semana de Ureta, el denunciante, un comerciante de alimentos balanceados con domicilio en barrio Alvear.
Al referirse a la mecánica del hecho fatal, el fiscal Vienna le achacó una “conducción imprudente, negligente y antirreglamentaria” al momento de impactar la parte frontal derecha del 408 con la moto conducida por la Altamirano. Con el agravante de “haberse dado a la fuga del hecho y no intentar socorrer a la víctima abandonándola el lugar luego de incapacitarla”.
Vienna le reprochó al imputado que “ni siquiera se detuvo, ni bajó del automóvil para ver qué había sucedido, y continuó su marcha por Ruta 18 para huir del lugar, evadiéndose así no sólo del siniestro sino también del accionar policial, y de la Justicia”.
Sobre el delito de falsa denuncia, el fiscal citó evidencia de entrevistas a conocidos del imputado, algunos de los cuales manifestaron que les envió mensajes de whatsapp diciendo que había tenido un accidente y no sabía qué tenía que hacer. A algunos de ellos les dijo: “Volqué. ¿Si voy y denuncio que me robaron? ¿Zafa?”.
Además un informe técnico sobre la tecnología de arranque del 408 puso en tela de juicio el relato del tipo de robo que el imputado denunció: “La superficie externa del tambor de arranque no presenta signos de adulteración presumiendo que es imposible el encendido sin su llave original”.
El juez Manfrín aceptó la calificación de homicidio culposo en accidente de tránsito agravado por el conductor haberse dado a la fuga, y no intentar socorrer a la víctima a la que había incapacitado, y falsa denuncia propuesta por la Fiscalía y dictó la prisión preventiva por el plazo de ley, es decir dos años, hasta un eventual juicio.
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