En su anteúltima sesión, la Cámara baja abordó enérgicamente el proyecto denominado “Puerto de la Música” de la ciudad de Rosario, y se pidió un informe al Ejecutivo para que brinde detalles acerca de la financiación y los recursos destinados a la iniciativa.
Al respecto habló con Sin Mordaza el diputado provincial del PPS – FPLV Oscar Urruty, quien remarcó la necesidad de colectivizar un debate sobre este proyecto porque “ésta no es una obra prioritaria para Rosario, una ciudad que hoy tiene otras necesidades”.
El legislador dijo que le preocupa la localización del Puerto de la Música, que estaría ubicado en la intersección de Avenida Pellegrini y Belgrano: “Se trata de un área portuaria transferida a la provincia para que funcione el Puerto, no fue transferida al Municipio para que haga lo que quiera. La Provincia tiene la posibilidad de usar seis hectáreas y ha cedido al concesionario del Puerto siete años más de contrato en forma directa”.
El Puerto está concesionado, en forma privada, por 25 años, y “hoy se han violado todas las ecuaciones económicas que se establecieron en su momento, ya que se le está dando al concesionario siete años más de explotación a los ingresos que actualmente tiene el Puerto, que son de alrededor de 4 millones de pesos por mes. De esta manera, en siete años, estaremos entregando a una empresa privada la posibilidad de ganar 350 millones de pesos a cambio de que nos ceda un terreno que es de nuestra propiedad”.
Para el diputado, esta es una cuestión de “suma gravedad” y “poco transparente” por eso “en la Cámara de Diputados estamos evaluando si esto no amerita la formación de una comisión investigadora”, adelantó.
Interrogado por las voces que aluden a que detrás de este proyecto se esconde un importante negociado inmobiliario, Oscar Urruty asintió, diciendo que “entendemos que es así, y esa es una hipótesis importante sobre la que debemos trabajar. Están colocando una obra en un espacio que no es público, tienen que hacer una negociación con el concesionario. Sobre el otro borde, le otorgan al concesionario la posibilidad de construir dos torres: una de ocho mil metros cuadrados y otra de cinco mil que no tienen nada que ver con la actividad portuaria. Esto también avala esta hipótesis de que detrás se esconde una operación inmobiliaria”, apuntó.
Consultado sobre el monto total de inversión que alcanzaría la puesta en marcha de esta obra, Urruty dejó entrever que hay dudas al respecto hasta en el propio seno del Ejecutivo provincial: “En un debate que mantuvimos con el ministro Hugo Storero, nos dio a entender que ni él tiene claro cuánto dinero saldrá esta obra. Dijo que saben dónde empieza la obra pero no donde termina, desde el punto de vista presupuestario, lo cual es más preocupante. Por un lado, el gobierno provincial reclama permanentemente fondos y plantea que hay una necesidad importante de recursos hasta llegar a la posibilidad de una reforma impositiva para nuevamente meterle la mano en el bolsillo a los santafesinos. Por otro, están comenzando una obra que sabemos cuánto podría ser el inicio, presupuestado en 48 millones, pero no cuánto es el final. Los expertos nos dicen que esta obra no puede demandar menos de 80 millones de dólares. Esta cifra es mucho dinero, por eso el gobierno debería repensar si es esta la obra necesaria para el Bicentenario o si reparar alguna situación de inequidad existente en Rosario y en otras localidades del área metropolitana de Rosario no amerita mucho más que esta obra, que tiene que ver más con una necesidad del gobernador de autorepresentarse, de que su gestión tome mediáticamente algún cariz más nacional, que a las propias necesidades de los rosarinos y los santafesinos”, concluyó.
Fuente: sinmordaza.com
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