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Narcocriminalidad

Procesan a sindicado líder del Primer Comando de Frontera e investigan si planeó asesinar a un juez

Se trata del Néstor "Negro" Rojas, quien ya estaba detenido en el penal de Ezeiza por tres homicidios y ahora sumó causa junto a ocho de los miembros de su banda por el tráfico de 11 toneladas de marihuana y 32 de cocaína. Investigan si pidió sicarios brasileños para atentar contra un magistrado


Nueve personas fueron procesadas con prisión preventiva como acusadas de integrar una banda narcointernacional autoproclamada Primer Comando de Frontera (PCF) que tenía asiento en Misiones, entre ellas, se encuentra el sindicado jefe, quien ya estaba preso por tres homicidios y se sospecha tenía elaborado un plan para matar a un juez que lo había enviado a la cárcel. En noviembre pasado, la mayoría de los sindicados miembros de la banda cayeron en cinco operativos donde los investigadores incautaron más de 11 toneladas de marihuana y 32 kilos de cocaína en el norte del país.

El Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Nación indicó este martes a través del sitio www.fiscales.gov.ar, que la medida fue dictada por el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal de Posadas, a pedido de la Fiscalía 2 de ese fuero, y de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar).

De acuerdo a la investigación judicial, se sospecha que el PCF mantenía vínculos con otras bandas asentadas en la República del Paraguay (Bala NA Cara) y en la República Federativa de Brasil (Primer Comando da Capital -PCC-).

Según la acusación de la Fiscalía, el Primer Comando de Frontera está liderado por Néstor Fabián “Negro o Loko” Rojas, quien se encuentra detenido en el Complejo Penitenciario Federal 1 de Ezeiza por tres hechos de homicidio, maniobras de narcotráfico organizado y por haber elaborado un plan criminal para atentar contra el juez de Instrucción 3 de la Primera Circunscripción de Posadas, Fernando Verón.

En el informe judicial se recordó que este magistrado investigaba a Rojas por el doble homicidio de Sebastián Vega y Rodrigo Ibarra, cometido el 17 de diciembre de 2015 en Misiones.

El Negro Rojas fue capturado el 13 de agosto de 2018 en el complejo La Aventura de Posadas y en la causa figura que estaba con unos entrerrianos negociando la venta de tres paquetes de cocaína. De allí, empezó el derrotero de este personaje temido por distintos juzgados, en el que su nombre sonaba desde 2015 ligado al narcotráfico y a la muerte.

Los procesamientos

Los procesamientos de Rojas y de los otros ocho imputados fueron dictados en base a los elementos reunidos en el expediente, entre ellos, los surgidos de las tareas de campo, análisis e intervenciones telefónicas que llevó a cabo durante meses el Centro de Reunión de Información Posadas de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA).

Así, los pesquisas determinaron “cómo estaba conformada la organización, los lugares en los que operaba y cómo era la modalidad para ingresar al país grandes cantidades de droga destinada a su comercialización”, a partir de lo cual, se logró el secuestro de más de once toneladas de marihuana y 32 kilos de cocaína en cinco procedimientos concretados en noviembre de 2020.

“La hipótesis es que la organización tenía su centro de operación en Misiones, en la zona oeste de la provincia de Buenos Aires y contaba con operadores en los vecinos países de Paraguay y Brasil”, indicó el informe del MPF.

Tras los operativos de finales del año pasado donde fueron detenidos los imputados, la Procunar solicitó sus respectivos procesamientos con prisión preventiva por el delito de “tráfico ilícito de estupefacientes, en la modalidad de comercio, agravada por el empleo de medios intimidantes y por la intervención de más de tres personas”.

“En el caso de Rojas (que ya estaba detenido) se requirió su procesamiento con prisión preventiva al atender que se trataba del organizador y financista de la cadena de tráfico, y se le solicitó un embargo de 65 millones de pesos”, se añadió.

Escuchas con amenazas

A su vez, a través de la Red de Fiscales Antidrogas de la Asociación Iberoamericana, la Procunar pidió realizar una investigación junto al MPF del Paraguay para “profundizar la persecución penal en relación a la facción que interactuaba en ese país con la organización liderada por Rojas en la Argentina”.

Además, se requirió al Ministerio de Justicia que se articularan las medidas necesarias a los fines de neutralizar el accionar del imputado desde su lugar de detención.

De hecho, Rojas sabía que sus conversaciones desde el penal era escuchadas por los pesquisas.

“Graben bien y ustedes saben de lo que le estoy diciendo, la sigla PCF, graben bien, porque lo van marcar para toda la vida, el resto de su corta vida”, fue uno de los extractos de las escuchas de Rojas incorporadas al expediente.

Y en otro tramo de la charla señaló: “Le voy a decir una cosa, tírenme cien, doscientos, trescientos años, no me importa, el peor error de ustedes es no haberme matado todas las veces que intentaron. Saben que ahora recién descubrí qué soy, y quién soy y ahora se van arrepentir de haber nacido, porque no tienen idea lo que le tengo preparado a todos ustedes y a cada uno de ustedes, ya van a ver, este es solo el comienzo y nada más.”

El imputado también apuntó contra otro juez, Miguel Ángel Guerrero, del fuero federal misionero de Eldorado: “Vos que sos tan guerrero, como dice tu apellido, jueces hijos de mil puta, que siempre se ríen de (inaudible) esos correntinos que va a entrar, juez nuevo también, (inaudible) todo lo que sea diversión. Vas a ver cuando comiencen a caer como mosca, porque como mosca van a caer y no van a saber ni qué pasó, ni un arma necesito, de esta vez le puedo asegurar que no necesito ni un arma”, amenazó Rojas.

El plan para atacar al juez Verón

El supuesto plan para atentar contra del titular del Juzgado de Instrucción Tres de Posadas, Fernando Verón, se desprendió de la interceptación telefónica que hizo el personal de la Gendarmería Nacional de las comunicaciones entre Rojas, alojado en Ezeiza, y uno de los integrantes del cuarteto detenido en mayo pasado en Posadas con armas y uniformes similares a los de la Policía Federal.

Verón se encuentra con custodia especial tras conocerse la historia, que incluso motivó la reunión de jefes de distintas fuerzas de seguridad. El interlocutor del Negro en esos contactos fue un hombre apuntado como el nexo argentino con peligrosos asaltantes brasileños. En esos mensajes, Rojas admitió: “Necesito resolver ese problema”. Y alertó además que están “queriendo agarrar a todos” y luego mencionó al magistrado: “Hablo del Juez Verón, que vive en …”.

“Hacele seguimiento cuando sale a trabajar, bien temprano. Lo mandamos hasta un semáforo y chau”, dijo en otra de las comunicaciones.

De los 357 mensajes se desprendió que el contacto del Negro habría aceptado traer los sicarios desde el Brasil, pero que por el cierre de fronteras por la pandemia del coronavirus, el plan habría quedado en stand by.

La idea de eliminar a Verón obedecía, según los textos que se le adjudican a Rojas, “porque nos va a traer problemas a todos”.

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