Dos de los cuatro detenidos acusados de ingresar a los tiros el domingo por la noche a la seccional 14ª de barrio Belgrano, donde resultaron heridos dos policías, fueron imputados de homicidio en grado de tentativa y portación de arma, en el marco de una audiencia que duró casi seis horas, y en la que se les dictó prisión preventiva sin plazo.
Otro de los apresados no fue imputado por encontrarse internado con una herida de bala (será acusado durante la jornada de hoy) y el cuarto quedó desvinculado de la causa ya que no fue reconocido en rueda de personas por ninguno de los tres policías que presenciaron el ataque.
La audiencia imputativa comenzó a las 16 de ayer y se extendió hasta las 22. Al finalizar los defensores se manifestaron disconformes con la resolución del juez López Quintana, por hacer “lugar a todos los pedidos de la fiscal de Flagrancia Andrea Vega y no acceder a ninguno” de sus planteos como morigeración de prisión o salidas laborares.
“No tienen nada. Se basan sólo en que los policías reconocieron a los imputados, pero uno de ellos había estado detenido ese mismo día y sufrido tormentos físicos. También circularon sus fotos en medios digitales”, dijo una fuente allegada a los imputados.
La misma fuente adelantó que si bien en la audiencia de ayer fueron expuestos los maltratos físicos inflingidos contra dos imputados en manos de policías, durante la jornada de hoy iban a denunciar apremios.
Las cuatro detenciones se produjeron entre la noche del domingo y la mañana de lunes en distintos hospitales de la ciudad. El primero fue Guillermo N., de 30 años, a quien apresaron alrededor de las 23 en el hospital Carrasco donde había ido a atenderse por una herida de bala en el pie, y según su abogado, por un sangrado en el oído que le habían provocado los golpes recibidos durante las horas anteriores que estuvo detenido en la seccional 14ª en confusas circunstancias. Es que, según la Policía, el joven cayó durante la madrugada del domingo sospechado de robar una cartera, pero las presuntas víctimas del hecho dijeron que estaban juntos y que en ningún momento les quiso robar.
Lo dejaron en libertad cerca del mediodía porque no tenía antecedentes y le abrieron una causa por portación ilegal de arma Casi una hora después, también en la guardia del Carrasco, fueron detenidos Fernando P., de 18 años, quien tenía una herida de bala en la pantorrilla, y Néstor P., de 27, quien no presentaba heridas pero vestía “ropa similar a la descripta” por los uniformados de la seccional 14ª. Este último recuperó ayer la libertad por no ser reconocido en rueda de personas.
El cuarto detenido cayó durante la mañana del lunes en la guardia del hospital Alberdi con un disparo en la pierna, y luego fue trasladado al Heca. Fue identificado como Emanuel G., de 18 años. Ayer no fue imputado porque sigue internado.
Según declaró la fiscal Andrea Vega el día posterior al hecho, a las 22.10 del domingo pasado, entre tres y cuatro personas armadas ingresaron a la seccional 14ª, ubicada en Marcos Paz 6650, y sin mediar palabra abrieron fuego contra los cuatro uniformados que en ese momento se encontraban de guardia. Los policías repelieron el ataque. El saldo fue dos empleados de la fuerza heridos de bala, ninguno de gravedad.
Tras el insólito hecho circularon distintas versiones. Una de ellas señalaba como autor del ataque a Guillermo N., quien había recuperado la libertad ese mismo domingo al mediodía propinando insultos a los policías por haberlo golpeado. Otra daba cuenta de un soborno que comprometía a efectivos de la seccional 14ª, con dos detenidos con los que habrían incumplido su palabra.
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