En una audiencia que se realizó en los tribunales de la ciudad de Santa Fe, la medida cautelar fue dispuesta a pedido del Ministerio Público de la Acusación (MPA). Al imputado se le atribuyó haber vulnerado la integridad sexual de la víctima desde que ella era una niña. Además, se le endilgó el incumplimiento de un mandato judicial.
El hombre, de 68 años, quedó en prisión preventiva mientras se lo investiga como autor de abusos sexuales a una mujer durante 25 años en la localidad de Gobernador Crespo, del departamento santafesino de San Justo.
El juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Pablo Busaniche, ordenó la medida cautelar en una audiencia que se desarrolló en los tribunales de la capital provincial.
La privación de la libertad fue solicitada por la Unidad Fiscal San Justo de la Fiscalía Regional 1. Al respecto, se indicó que “aunque la Defensa se opuso al requerimiento, estaban dadas las condiciones para imponer la preventiva y el magistrado hizo lugar a la pretensión fiscal”. En relación al plazo de la medida, se precisó que “el imputado, cuyas iniciales son JAC, permanecerá detenido durante todo el tiempo que dure la investigación”.
Violencia de género
La Fiscalía señaló que “el hombre investigado agredió sexualmente a la víctima a partir del año 1997 y hasta junio del año pasado”, y aclaró que “ella era una niña cuando comenzaron los abusos”.
En la audiencia se relató que “durante dos décadas y media, el atacante ejerció violencia de género sistemática en contra de la mujer”, y se afirmó que “la mayoría de los hechos delictivos fueron cometidos en establecimientos rurales”.
Asimismo, se expuso que “el imputado amenazaba de muerte a la víctima de forma constante”, y se puntualizó que “en una oportunidad, la ató de pies y las manos y le dijo que iba a inyectarle un remedio para caballos en las venas”. En tanto, se remarcó que “en diferentes ocasiones la golpeó con objetos contundentes, por ejemplo, la lesionó en la cabeza con un rebenque”.
Por otro lado, se manifestó que “en octubre del año pasado, un tribunal de Familia dispuso una medida judicial por la cual el hombre de 68 años no podía acercarse a la mujer a la que abusó”. Sin embargo, se aseveró que “él transgredió deliberadamente la restricción”.
El MPA subrayó que “para concretar sus conductas ilícitas, el investigado se aprovechó de la asimetría etaria entre él y la víctima”, y afirmó que “generó situaciones violentas que atentaron contra la libertad, dignidad, integridad física y psicológica de la mujer”.
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