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Presidenta y ama de casa

Chinchilla, la flamante presidenta electa de Costa Rica, admitió que su casa está desordenada debido a su actividad política. ¿Podrá con todo?

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La futura presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, admitió que su hogar estaba desordenado ayer debido a sus deberes políticos y que tuvo problemas para saber “si la camisa estaba planchada”, mientras esperaba el escrutinio de las elecciones.

En su primer encuentro con la prensa luego de ganar las elecciones, Chinchilla relató que luego de votar se fue a su hogar, “que siempre ha sido mi principal refugio”, junto a su marido y su hijo, ambos llamados José María Rico, y tres colaboradores para esperar el resultado de los comicios.

“La verdad es que en la casa había un poco de desorden. La muchacha (empleada doméstica) que trabaja con nosotros se toma el fin de semana y éste no íbamos a hacer la excepción”, dijo la politóloga de 50 años, que sucederá al presidente saliente Oscar Arias en mayo.

“Mientras buscábamos que si la camisa estaba planchada, que si el pantalón, ahí me iban contando como iba el conteo” de los votos, agregó entre sonrisas de los periodistas de medios costarricenses y extranjeros.

El desorden en la casa “fue un poco propio, yo creo, de lo que es un hogar en donde una mujer decide meterse en estos enredos”, agregó en la rueda de prensa que ofreció en un hotel de San José luego de celebrar su triunfo ante miles de seguidores.

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