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Sudoeste

Pobreza y muerte: otras dos ejecuciones en la Vía Honda enlutaron la Navidad

Sin mediar palabra, dos motociclistas se acercaron a un grupo de jóvenes y asesinaron a dos, de 19 y 21 años. La violencia extrema ya se cobró otras tres vidas en esa zona postergada donde los crímenes no son esclarecidos pero se vinculan con los negocios ilegales de la subsistencia 


Manantiales al 3700. Archivo.

Un ataque a balazos durante la tarde del 24 de diciembre enlutó la Navidad en la zona de la Vía Honda, en el extremo sudoeste de la ciudad, con la muerte de Pablo Ismael Brest y Milton Sosa, de 19 y 21 años. Ambos jóvenes se encontraban junto a otras personas en la entrada de un pasillo de Manantiales y Biedma que se comunica con varias viviendas precarias cuando se acercaron dos motociclistas y los ejecutaron a tiros, atentado en el que también recibió un balazo en el tobillo un vecino de 29 años. La violencia y la pobreza extrema parecen haber confluido en esa parte del barrio donde este año ya fueron asesinadas otras tres personas.

Según fuentes judiciales, el doble homicidio ocurrió en la previa de la Nochebuena, a las 17.30 de este jueves a metros de la intersección de Manantiales y Biedma. Hasta allí llegaron dos motociclistas que sin sacarse los cascos detuvieron la marcha frente a un grupo de jóvenes. El acompañante bajó del rodado —una moto tipo enduro– y abrió fuego sin mediar palabra contra dos de ellos, luego volvió al vehículo que arrancó a toda velocidad.

Pablo, de 19, y Milton, de 21, murieron en el lugar según constataron los médicos del Sies que llegaron junto al Comando Radioeléctrico. Ambos tenían domicilio a unas 15 cuadras de donde los encontró la muerte, en la zona conocida como barrio Moderno. En tanto Matías V., de 29, recibió un disparo en el tobillo y fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) donde recibió las curaciones y le dieron el alta.
Según fuentes policiales, en la escena del crimen fueron secuestradas cinco vainas servidas calibre 9 milímetros.

El fiscal de Homicidios encargado de investigar el caso, Alejandro Ferlazzo, pidió que se realice un relevamiento de cámaras que dio resultados negativos. También ordenó que se realice autopsia en los cuerpos de ambas víctimas en el Instituto Médico Legal.

Una joven cuya mamá vive en el barrio dijo que los jóvenes asesinados “estaban vendiendo droga”. Según esa persona, “ya es moneda corriente esto de tantas muertes, los vecinos no se sorprenden más, ni se acercaron a chismosear”, luego del doble homicidio.

Carlos

El martes pasado, también a las 17.30, un hombre de 45 años fue asesinado dentro de su casa de la Vía Honda de Patagones al 3900, entre la prolongación de Biedma y Presidente Quintana. Según voceros del caso, dos sicarios entraron a la humilde vivienda y mataron a balazos a Carlos Alberto Ramos, de 45 años, hirieron en el brazo a su hijo Facundo, de 19, en la espalda a su amigo Andrés mientras que a su esposa le pegaron un culatazo en la cabeza.

La mujer contó que los dos agresores más un tercero que hizo de campana en el pasillo cubrían sus rostros con barbijos. En relación al móvil del ataque deslizó que seguramente se equivocaron de casa, ya que les pedían a gritos plata, siendo que viven en la más extrema de las pobrezas. En esa línea de hipótesis, allegados dijeron que a pocos metros de esa vivienda se domicilian familiares de un hombre detenido como líder de una banda narco.

Brandon

A principios de septiembre, una dupla de muchachos persiguió por la Vía Honda y asesinó a machetazos a Brandon Brandon Miguel Ángel “Tartita” Soraire, quien tenía 20 años. Un rato antes, el joven había pasado caminando con su novia y el hijo de ella por un pasillo a la altura de Cerrillos al 3900 y cruzado unas palabras con sus agresores. Cuando pasó de regreso, sin el niño, volvieron a intercambiar palabras y terminaron a las trompadas. El abuelo de uno de los pibes del pasillo le alcanzó un machete que fue el utilizado por su nieto para quitarle la vida a Brandon, según se relató más tarde en una audiencia imputativa, ya que el muchacho fue detenido y acusado, al igual que su abuelo.

Dora

También este año fue asesinada una mujer de 63 años quien quedó en el medio de una balacera en 24 de Septiembre y Manantiales. Dora Ercilia Quiroga estaba en el ingreso de un pasillo cuando pasaron personas en un auto que perseguían a dos en moto, a los tiros. Una bala hirió en la espalda a la mujer, domiciliada en barrio Avellaneda Oeste, quien murió en el acto. El homicidio ocurrió el primer martes de febrero.

Los vecinos contaron en esa oportunidad que entre tres y cuatro hombres que iban en un Clío “oscuro” dispararon contra dos personas que circulaban en una moto y trataban de esquivar las balas.

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