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Pilay, una empresa que trabaja desde hace más de 35 años en Rosario y marca tendencia en construcción

Pilay, una empresa que trabaja desde hace más de 35 años en Rosario y con su trayectoria marca tendencia en construcciones


Martín Prez, Ceo de Pilay, accedió a contar la historia de la firma, los proyectos realizados y los que están en carpeta. La cartera de clientes asciende a 22 mil. ¿Qué busca el rosarino a la hora de mudarse o hacer una inversión con un inmueble?

Pilay se fundó en Santa Fe a mediados de la década de 1980. En 1989 se abrió la unidad de negocios de Rosario, en 2006 la de Córdoba, abarcado así la región centro del país, y cuatro años después se expandió a Uruguay, aunque con una diferente composición accionaria. Se trata de una empresa comprometida con la administración de ahorros e inversiones a través de grandes desarrollos constructivos y urbanísticos.

Pilay se asoció con Bauen en 1988 para un plan de construcción de departamentos en Rosario a pagar en 20 años. Desde ese entonces, es posible reconocer las realizaciones de la empresa en las fachadas de ladrillos vistos de sus edificios: los Bauen Pilay. Es una imagen de marca a partir de la que en Pilay se abrió a sus nuevas construcciones. De la empresa monoproducto, hace unos 5 años comenzó a explorar nuevos desarrollos, como los lotes  y diseños con distribuciones de espacios diferentes de las unidades por la necesidad de mayor amplitud en metros cuadrados, entre otros diferenciales. “Eran mercados  que no estábamos atendiendo”, enfatizó Prez.

La industria de la construcción genera un efecto multiplicador en otros sectores de la economía y eso Pilay lo incorporó a su ADN. Hoy, sus prioridades son competir con otras desarrolladoras, construir una imagen de negocio diferente, con unidades de identidad propia y con planes de pago a largo plazo.

Prez explicó que, según su experiencia, el rosarino busca hoy el espacio verde, un fenómeno que se potenció durante la pandemia: poder disfrutar del aire libre en la vida cotidiana. “Lo que era un gran atributo, vivir en el centro, dejó paso en todas las grandes urbes al deseo de zonas con más espacios y más verde, con mejor calidad de vida y con servicios que van llegando y van haciendo la vida más cómoda también”, repasó la tendencia. Y aclaró que en esa línea los proyectos ya se piensan en clave de comunidad y no únicamente como inmueble aislado.

Lo ejemplificó con el proyecto y los loteos en Cinco Lagos, en Ibarlucea, junto a la desarrolladora Life. O el loteo en San Tomás en la ciudad de Santa Fe, o el de Sauce Viejo. “La idea no es pensar una ciudad dormitorio sino que cuente con todos los servicios necesarios: escuelas, comercios, de forma integral. Que la construcción no sea un lugar donde ir a dormir sino un lugar para vivir”, se explayó.

Rosario, dijo, crece preferentemente como ciudad hacia el oeste, hacia Fisherton, pero de todas formas también los inversores buscan zonas que remitan al arraigo del barrio en el que se criaron o del que tengan buenos recuerdos. “Pilay tiene construcciones y desarrolla edificios en todas las zonas de la ciudad”, expuso Prez.

Una de las condiciones que el Ceo de Pilay considera indispensable para que la actividad de la construcción siga en auge, traccione y haya más volumen a futuro es la recomposición del salario. La otra, igualmente importante, es el regreso de los créditos a largo plazo y tasas accesibles para las familias. “La demanda y el déficit habitacional están”, completó el escenario.

Construcciones modernas

Las construcciones de los edificios se modifican al compás de los avances tecnológicos. Así, por ejemplo, es posible dotarlas de mayor eficiencia energética. “Cierta tecnología relacionada con los ladrillos, con las aberturas”, citó como ejemplos de mejoras en las aislaciones térmicas. Y así, disminuye el requerimiento del calefactor durante el invierno o el aire acondicionado en verano. Otro factor que contribuye es el modelo de condominio: al tener más áreas verdes y ser construcciones bajas, la concentración de calor es menor.

“La tecnología, los materiales y los prototipos constructivos que estamos utilizando redundan en que sean construcciones más sustentables” en términos energéticos, resumió.

Sustentabilidad

El CEO de Pilay sostuvo que en otros mercados ya está instalada la idea de una valorización de las propiedades dentro del paradigma de la sustentabilidad.  “Todo aquel que no esté dentro de algún producto o no  lleve una propuesta de valorización a su cliente, que no contemple algo sustentable, probablemente se quede fuera del mercado, todo lo relativo a certificaciones y sintonía con el medioambiente tiene que estar sobre la mesa y en la propuesta de valor que se le ofrece al cliente”, enfatizó sobre la línea que sigue la empresa.

Sueño de la casa propia

En Pilay están invirtiendo actualmente unos 22 mil clientes. Esa es la cartera de la región centro. El sueño de la casa propia sigue vigente, aun cuando las circunstancias económicas lo distancien del poder adquisitivo de las familias. “El ahorro en metros cuadrados y el plan de pago a largo plazo está en nuestro ADN”, señaló al respecto y agregó que compiten con otras desarrolladoras con el atributo diferencial de financiamientos más amplios para permitir el acceso a un número mayor de interesados.

Entregas

Pilay tiene previsto entregar en mayo las dos primeras torres de condominios en Los Pasos Fisherton I, para continuar el año que viene con el resto.

Proyectos

Uno de los grandes proyectos es el predio de la ex Fecovita, en la zona norte de la ciudad. “Lo adquirimos ya hace un tiempo y el Concejo Municipal aprobó los indicadores hace poco”, relató. En relación a los servicios, señaló que junto a otras desarrolladoras que están construyendo en la misma zona solicitaron a la Epe un esquema similar a lo que fue el fidecomiso para la provisión de gas en red. Es que el suministro eléctrico en esos espacios es crítico, aclaró.

Además, la firma continuará con la comercialización de nuevos lotes en Cinco Lagos. Y en carpeta tiene nuevos proyectos en el centro de la ciudad y en Funes. En suma, los mercados tradicionales y los nuevos, con otras exigencias y los más recientes paradigmas residenciales.

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