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Piden por la ley de Suelo para bajar la especulación con lotes

La provincia logra entregar terrenos para viviendas a 80 mil pesos, por lo que afirman que la norma ampliará la oferta estatal.


El gobernador Antonio Bonfatti entregó ayer 150 lotes del programa “Mi Tierra, Mi Casa” en el Parque Habitacional Ibarlucea, un predio ubicado en la zona noroeste que se urbanizó para el acceso de rosarinos al lote propio. El secretario de Hábitat santafesino, Gustavo Leone, dijo que el valor final que tienen esos terrenos es de entre 67 y 87 mil pesos. Esa cifra es, como mínimo, la mitad de lo que se ofrece hoy en el mercado en la ciudad y las localidades aledañas. De esa forma, el funcionario aprovechó la ocasión para volver a pedir a la Legislatura provincial que apruebe la llamada de ley de Suelo para que municipios y comunas dispongan de más parcelas y las cedan a valores más bajos que lo que ofrecen los privados.

Bonfatti y Leone entregaron ayer a los beneficiarios los boletos de compraventa, documento que permitirá a las familias tener la posesión de la tierra y comenzar la construcción de la vivienda.

Los lotes tienen un valor final de entre 67 y 87 mil pesos. Para llegar a esta instancia, los adjudicatarios pagaron a principios de mes un anticipo del 25 por ciento, mientras que el resto será financiado en hasta 5 años sin interés, dependiendo los ingresos.

Para citar un ejemplo concreto: un lote de 350 metros cuadrados tiene un valor final de 87.600 pesos. El anticipo que pagó el comprador fue de 21.900, y el resto lo abonará en 60 cuotas fijas de 1.095 pesos.

Leone agregó también que hay terrenos que tienen 250 metros cuadrados y que el valor promedio de esa unidad de medición es en todos los casos de 245 pesos.

Respecto de la construcción de las viviendas, las mismas se realizarán por autogestión: los beneficiarios pueden optar por llevar adelante su propio proyecto constructivo o bien elegir entre diversos prototipos que provee el gobierno provincial (en este último caso existe financiamiento a través del Banco Municipal de Rosario para el componente de materiales necesarios para edificar un núcleo básico).

Leone explicó a El Ciudadano que esa entidad entregará alrededor de 100 mil pesos, lo que aproximadamente “permite la construcción de una vivienda de un dormitorio”.

Varios de los beneficiarios que ayer estuvieron en zona norte también han sido adjudicados del crédito Procrear. Leone explicó que una vez que esas familias terminen de pagar sus lotes podrán escriturar y así utilizar la línea crediticia que financia la Ansés a través del gobierno nacional.

Ley de Suelo

Leone volvió a pedir la aprobación de la llamada ley de Suelo, la cual está trabada desde mayo del año pasado y aún no logra consenso para ser aprobada. Entre otros aspectos, busca penalizar la tenencia especulativa de tierras en desuso a través del pago de mayores impuestos.

“Esta es una herramienta que a los municipios les servirá para hacerse de suelo y acompañar la política habitacional. Cada vez que se habilite un nuevo loteo privado el Ejecutivo local podrá reservarse uno de cada diez lotes para luego cederlo a precios accesibles. Si en estos años hubiésemos tenido una ley así en localidades como Funes o Roldán se hubiese dispuesto de mucha tierra”, explicó el funcionario.

El dato no es menor. La brecha en los costos es altísima. Cualquier emprendimiento privado hoy en la región ofrece terrenos a no menos de 180 mil pesos. Para familias de sectores medios y bajos es difícil acceder con esos precios.

Un nuevo barrio en el noroeste

El Parque Habitacional Ibarlucea, donde ayer estuvo el gobernador Bonfatti, está emplazado en la zona norte en un predio de 66 hectáreas delimitado por las calles Tres Sargentos, Cullen y Ugarte, Camino Límite y Calle 1326.

Con la conclusión de las obras de urbanización, el mismo quedó dotado de energía eléctrica, alumbrado público, pavimento, veredas y rampas.

Las obras demandaron una inversión del gobierno provincial superior a los 35 millones de pesos, que se complementa con la ejecución de una Planta de Ósmosis Inversa que asegurará la provisión de agua potable no sólo a los futuros vecinos sino también al entorno inmediato.

En agosto, otros 200 vecinos recibirán su boleto de compraventa en el Parque Habitacional Ibarlucea al tiempo que 150 familias tomarán posesión de un terreno en el loteo Avellaneda Oeste, otro de los emprendimientos enmarcados en el programa “Mi Tierra, Mi Casa”.

Por un acceso al desarrollo habitacional

La ley de Uso del Suelo y Hábitat promueve un conjunto de herramientas que “contribuyen a la consolidación de un marco legal más igualitario en materia de acceso al suelo, que permiten al Estado provincial y a los municipios y comunas que adhieran a la misma, avanzar en la construcción de soluciones habitacionales, y prevenir y revertir situaciones de informalidad urbana”, según explicaron desde la Casa Gris.

El proyecto que duerme en la Legislatura provincial desde mayo del año pasado apunta a reforzar el desarrollo habitacional, ampliando el marco jurídico con el que cuenta la provincia para garantizar el derecho constitucional a la vivienda y el hábitat digno. “Tal objetivo se alcanza a partir de la creación de instrumentos de gestión social, urbana y fiscal, que permiten la construcción de un nuevo orden urbano por parte del gobierno provincial y de los municipios y comunas que adhieran a la presente”, expresa el texto que envió el Ejecutivo.

El proyecto promueve la instalación de procesos de gestión democrática que permitan la redistribución de las cargas y beneficios del desarrollo urbano y aporta herramientas legales que facilitan la regularización de los asentamientos irregulares a la vez que posibilitan el acceso a un lote urbano a familias que hoy no logran acceder a un hábitat digno.

En algunos de sus artículos, la ley explicita que se busca “desalentar la tenencia especulativa de suelo urbano suburbano, en el marco de la función social del suelo”, como también la incorporación de instrumentos que alienten la redistribución de ingresos y recursos entre sectores con capacidad de ahorro y acumulación en términos de bienes inmobiliarios y sectores excluidos del acceso al suelo urbanizado con servicios y la vivienda”.

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