Edición Impresa

Aniversario y Dolor

Piden justicia por el crimen de un joven

Familiares y allegados de Iván Romano se reunieron frente a los Tribunales.


A un año de la muerte de Iván Daniel Romano, un muchacho de 20 años asesinado a tiros en barrio Emaús, sus familiares y amigos se concentraron en la puerta de los Tribunales provinciales para exigir Justicia. “Acá se destruyó una familia y nadie se hace cargo”, dijo uno de los voceros de la manifestación que tuvo como objetivo exigir que la causa llegue a juicio y se condene a los sospechosos. Por el caso hay un hombre de 58 años procesado como instigador de la muerte, y un joven de 19 sindicado como quien facilitó y luego hizo desaparecer el arma utilizada en el hecho. En tanto, el autor material del crimen permanece prófugo.

“La causa está parada”. Eso fue lo que sostuvieron ayer a la mañana los familiares y amigos de Iván Daniel Romano, quienes se autoconvocaron en Balcarce 1650, frente al edificio de Tribunales, para exigir Justicia por el crimen del muchacho de 20 años. Ayer se conmemoró el primer aniversario de su muerte.

“Hace rato que no hay novedades en la causa y el asesino sigue caminando por el barrio sin que la policía haga nada. Estamos agotados de pedir Justicia. No puede ser que la muerte de un pibe que tenía toda la vida por delante quede impute”, dijo frente a los presentes uno de los voceros de la manifestación, quien agregó que los familiares de la víctima debieron abandonar Emaús, el barrio donde vivieron toda su vida, y que se encuentran en una situación de pobreza extrema ante la falta de recursos.

Es que si bien por el crimen de Romano hay dos detenidos, la persona que jaló el gatillo nunca fue atrapada y sigue prófuga.

De acuerdo con la investigación, a Iván Romano lo mataron la noche del 24 de agosto de 2013 en la casa de sus padres, ubicada en Tarragona al 1100 bis, en barrio Emaús.

El joven festejaba el cumpleaños número 19 de su hermano Nahuel. En un momento de la fiesta, los dos hermanos salieron a comprar gasesosas. Cuando volvían con las bebidas, un grupo de jóvenes que vive en la zona y estaba reunido en una esquina les exigió que un trago. Iván y Nahuel se negaron, lo que originó una pelea.

La batahola se terminó cuando algunos familiares de los Romano salieron a la calle y pararon la gresca. Pero la cosa no terminó allí. Más tarde, los muchachos que estaban en la esquina se presentaron en el cumpleaños acompañados del padre de uno de ellos y comenzaron a arrojar piedras contra la casa. Cuando Iván intentó salir a frenar el ataque, le dieron un tiro. Fue trasladado en un auto particular al Hospital Centenario, pero no pudo reponerse de sus heridas y falleció horas más tarde.

Las pesquisas por el crimen concluyeron en la detención de Manuel Joel C., de 58 años, y padre de uno de los supuestos tiradores, que fue procesado en calidad de instigador del crimen. Según la causa, este hombre presenció todos los incidentes y lejos de calmar a sus hijos, los arengó a ir a buscar “los fierros”.

También fue apresado Jonatan Maximiliano E., de 19 años, sindicado como partícipe necesario en el delito de homicidio agravado por el uso de arma y la participación de un menor. Para el juez Juan Andrés Donnola, que instruyó la causa, fue él quien proveyó las armas para el ataque y luego las hizo desaparecer.

Acerca del autor material, a partir de algunos testimonios se determinó que el presunto autor de los disparos es uno de los hijos de Manuel Joel C. que se encuentra plenamente identificado, aunque a la fecha permanece prófugo.

Comentarios