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Mejor drenaje

Piden aprobación de una ley que ayudará contra las inundaciones

Establece pautas para proteger los humedales que, según organizaciones ambientalistas, mitigan efectos de las lluvias.


Organizaciones ambientalistas advirtieron que para dar una solución estructural a las reiteradas inundaciones que se vienen desatando en distintas provincias del país se debe priorizar la protección de los ecosistemas de humedales.

Las organizaciones reclamaron a Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados, que haga posible el tratamiento y la aprobación de la ley de Humedales, que cuenta con media sanción del Senado, ya que de no ser tratado en lo inmediato el proyecto perderá estado parlamentario.

Así se expresaron Greenpeace Argentina, Fundación Vida Silvestre Argentina, Fundación Humedales, Banco de Bosques, Fundación Ambiente y Recursos Naturales y otras organizaciones de la sociedad civil.

La ley de Humedales establece las pautas para restringir la ocupación de estos ecosistemas, de modo que puedan cumplir adecuadamente su función ambiental.

Las últimas inundaciones están asociadas con fenómenos climáticos, pero el relleno de humedales agrava notablemente esta situación, según aseguraron las organizaciones en un comunicado.

Además, recordaron que los humedales actúan como esponjas y ayudan a mitigar los efectos que provocan las fuertes lluvias, pero cuando se los rellena, por ejemplo, para construir emprendimientos inmobiliarios pierden tal capacidad de absorción. Al eliminar los humedales, las consecuencias de las inundaciones son mucho más graves.

La ley de Humedales regularía las edificaciones y otras actividades que afectan estos ecosistemas. “Las inundaciones registradas en las provincias de Buenos Aires y Santa Fe ameritan que la Cámara de Diputados someta a discusión este proyecto en su sesión de este miércoles, 26 de agosto, para dar una solución estructural al indebido uso del suelo en zonas que debieran ser protegidas, no sólo por la riqueza de su biodiversidad sino también por los servicios ambientales que prestan a la sociedad en su conjunto”, planteó Franco Segesso, de Greenpeace.

Según especialistas de las universidades públicas de Buenos Aires y San Martín, en los últimos diez años la construcción de proyectos inmobiliarios que implicaron el relleno de humedales aumentó significativamente, convirtiendo estos ecosistemas en “tapones” que, en lugar de absorber, retienen el agua que baja por arroyos y ríos.

Además del relleno de humedales, la predominancia de los monocultivos, el uso intensivo de agroquímicos, los canales artificiales en zonas agropecuarias y la deforestación también contribuyen a la pérdida de capacidad de absorción del suelo y agravan los efectos de las inundaciones.

Optimismo por baja del río Salado

El río Salado alcanzó ayer su pico máximo en las localidades bonaerenses de Ranchos, Villanueva y General Belgrano y ya comenzó a descender, por lo que ese caudal de agua llegaba ayer a Pila, Lezama, Castelli y Chascomús, pero sólo afecta el área rural, mientras las autoridades son optimistas en que el buen tiempo acompañará hasta el sábado.

El subsecretario de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes, Ángel Marinaro Rodó, dijo a la agencia Télam que “hay expectativas positivas sobre la crecida del Salado porque habrá buen tiempo al menos hasta el sábado”. Además, confirmó que “no hay registros de anegamientos en sectores urbanos”.

“En las localidades de Pila, Lezama y Chascomús esperamos que el agua baje durante las próximas 72 horas, mientras que en Castelli está prevista una lluvia de cerca de 20 milímetros para mañana (por hoy)”, señaló el funcionario.

En tanto, varias rutas seguían ayer cortadas, según informó la Dirección Nacional de Vialidad. Las rutas 41, 46 y 50 permanecían cerradas al tránsito y las rutas 29 y 65 se encontraban afectadas por la presencia de agua sobre la calzada.

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