El comisario José Luis Catuzzi de 52 años fue condenado a prisión perpetua por el femicidio de su pareja Ariadna Cristina Sandoval ocurrido en la localidad de Recreo en octubre de 2017. El tribunal que presidió el debate dio por probado la teoría fiscal que contó cómo el acusado empujó a la víctima de un vehículo en movimiento, lo que le generó un tremendo golpe en la cabeza que le produjo una fractura de cráneo y tras más de dos meses de agonía murió. El fiscal Gonzalo Iglesias sostuvo que había un trasfondo de violencia de género no sólo físico, sino también un sometimiento psicológico constante, un control, un asedio que desencadenó en este lamentable suceso.
El tribunal de Santa Fe a cargo de los jueces José Luis García Troiano, Rosana Carrara y Luis Octavio Silva condenó este miércoles por unanimidad al jefe policial José Luis Catuzzi a la pena de prisión perpetua por los delitos de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por haberse cometido por una hombre contra una mujer mediando violencia de género. La acusación estuvo a cargo de los fiscales Gonzalo Iglesias y Ana Laura Gioria.
El femicidio se produjo la tarde del viernes 20 de octubre de 2017 cuando el agresor y la víctima se trasladaban en un Fiat 147 por la ruta nacional 11 y entre las calles Los Sauces y Los Pinos, de Recreo, Catuzzi abrió la puerta del acompañante y empujó a Ariadna del vehículo en movimiento.
Ariadna cayó sin poder atinar a amortiguar la caída, lo que le provocó un fuerte golpe en la cabeza que le produjo una fractura en el cráneo de la que no pudo recuperarse, murió el 28 de diciembre de ese año a los 47 años.
“Tenemos la satisfacción de haber arribado al resultado esperado, luego de una investigación que fue bastante larga y en la que también intervinieron los fiscales Estanislao Giavedoni, Ezequiel Hernández, Mariela Jiménez y Alejandra Del Río Ayala”, enumeró Iglesias.
En tal sentido, la fiscal subrayó que “durante el debate hubo cerca de 100 testigos. Muchos de ellos fueron médicos, quienes declararon por su condición y por su función como personal de la salud, mientras que otros lo hicieron por el contacto que tuvieron con la víctima al momento de la atención que le brindaron”.
Iglesias manifestó que “logramos acreditar el vínculo de la víctima y el victimario y el contexto de violencia de género” y añadió que “se trató de una relación signada por la violencia física y por un sometimiento psicológico constante”.
En tal sentido, sostuvo que “Catuzzi eligió un medio más que idóneo para darle muerte a la víctima y se abusó de su presunta superioridad como hombre sobre una mujer”.
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