Un grupo de paraguayos tocó la gloria y cayó en desgracia tras una jornada hípica en Reconquista.
Luego de una triunfal jornada en el Hípico de Las Garzas, en el departamento General Obligado, en la que Chico Negro, “el caballo más rápido del Paraguay”, arrasó contra todo pronóstico, los burreros guaraníes denunciaron que gendarmes de un control vehicular en Formosa los despojaron del dinero ganado en las apuestas, que se calcula en 500 mil pesos, aunque en un primer momento circuló la versión de que eran 5 millones de pesos.
crédito guaraní
Se corría el Gran Premio Internacional. Los billetes de 500 pesos fluían a favor de sobre otros dos renombrados equinos como Cambá Porá, de Posadas, y el formoseño Eclipse.
Hasta minutos antes de la carrera denominada Haras El Remanso, la plata a favor de uno y de otro fluía por todos lados, en una jornada que convocó a unas 6 mil personas en el hípico ubicado a unos 40 km al norte de Reconquista.
Cuando Cambá Porá se retiró de las apuestas, jugaron mano los dueños de Chico Negro y Eclipse. La apuesta ascendió al millón y medio de pesos. Largaron y desde abajo Chico Negro demostró que era superior, dominó todo el trayecto de 350 metros y llegó con holgura al final.
Tras los festejos, los ganadores emprendieron el viaje de regreso a su tierra, pero en el camino sufrieron un contratiempo, cuando en el control caminero de Tatané, en la provincia de Formosa, efectivos de Gendarmería Nacional les confiscaron la bolsa, en la que llevaban unos 500 mil pesos en efectivo.
Mal trago con gendarmería
No existe información oficial de Gendarmería, pero se estima que el secuestro del dinero se debe a la apertura de una causa por el delito de “lavado de activos”, ya que los implicados no pudieron documentar el origen del dinero, señaló El Litoral. Si bien fueron demorados para su identificación, no quedaron detenidos, por lo que regresaron a su país.
El curioso episodio se dio a conocer por los audios de Whatsaap del dueño de Chico Negro, que pedía asesoramiento a un abogado y quería saber si Gendarmería tenía atribuciones para despojarlos del dinero. Embroncados, enviaron los mensaje de voz a los organizadores reclamando que los ayuden porque los uniformados les estaban quitando la plata ganada en apuestas.
“Esto no se hace amigos argentinos”
El dueño del cuarto de milla Chico Negro que se identifica en un audio de Whatsapp como Teto Morell, se comunicó con uno de los organizadores para pedirle que lo ayude a resolver la situación que se planteó con sus compatriotas. “¿Se puede hacer eso, amigo? Por favor si me ayudás y si puedo poner un abogado, porque para mí es muy injusto”. Y agregó: “Quiero enterarme de las leyes argentinas, soy paraguayo, soy el dueño de Chico Negro y a mi hermano le están sacando toda su platita que ganó y a otros amigos también”.
En otro pasaje de su desesperado pedido Morell manifiesta: “Esto no se hace amigos argentinos, hay que saber perder”. Además, hace un llamado a sus compatriotas: “Atención, amigo paraguayo, estos hijos de puta de policías de la Argentina están sacando toda la plata que estamos ganando, por favor cuídense”.
versión de los organizadores
El organizador de carreras de caballos Matías Chapero habló sobre el episodio de Teto y Gendarmería. Según su versión, fue mucho menor el monto a lo que se difundió.
Si bien en una primera instancia trascendió que eran 5 millones de pesos, Chapero aclaró que la suma ronda los 1.270.000, entre pesos y dólares.
“Han venido entre 400 y 500 personas de Paraguay porque su cultura y su forma de correr pensaban que acá era la misma. Están acostumbrados a apostar mucho dinero, es muy diferente a las carreras que vivimos acá. Ellos corren una sola carrera y nosotros 10 o 12 en el mismo día, pero ellos en esa carrera apuestan 10 veces más que lo que apostamos nosotros en las 10 carreras. Vinieron con la idea que van a poder jugar muchísima plata, ingresaron con muchísima plata”, contó a Reconquista Hoy. Y aclaró: “Fueron 1.270.000 entre 4 personas, entre pesos y dólares, es lo que dice el dueño del caballo y el hermano. Es el dueño de Chico Negro, él nos llamó pidiendo ayuda porque mi hermano es abogado”.
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