El intendente municipal Pablo Javkin inauguró, este jueves en el recinto de sesiones Raúl Alfonsín del Palacio Vasallo, las sesiones ordinarias ante el pleno del cuerpo local. Hablo de “días oscuros”, del flagelo que aqueja la ciudad y de un gobierno valiente que enfrenta a las agencias criminales montadas desde las cárceles “buscan pararlo, pararnos”, aseguró y dijo que pagan los laburantes, la gente buena, las víctimas.
“Abro estas sesiones en medio de una Argentina en turbulencia pero más aún, en una Rosario lastimada. Atravesamos una vez más días oscuros. Los mafiosos golpean porque les duele que al fin se les está desarmando esa agencia de empleo criminal que habían montado en cárceles que nadie controlaba, con la inteligencia para escucharlos desmontada, con complicidades y debilidades imperdonables. Que quede claro, no es gratis darle libertades a quienes las usan para amenazar, extorsionar y matar. Eso lo pagan los laburantes, la gente buena, las víctimas rosarinas. Ahora, cuando un gobierno valiente los enfrenta, buscan pararlo, pararnos”, dijo.
Agradeció Javkin la disposición del gobierno nacional y aseguró que la inseguridad es un problema de la Argentina entera. El agradecimiento lo hizo extensivo a los gobernadores e intendentes del país y los rectores de las universidades nacionales, organizaciones intermedias, sociales y gremiales de la ciudad y familiares de víctimas de violencia altamente lesiva. “La mafia debe saber que por mucho que nos golpeen, estando todos unidos, no nos van a ganar. Rosario está de pie. Rosario no se rinde”, enunció.
Casi finalizando el discurso, volvió sobre el tema de la violencia. Mostró su apoyo al gobernador Maximiliano Pullaro, destacó su valentía y dijo: “No esperen de este intendente ni un segundo dedicado a atender amenazas, ni las que se hacen desde la cárcel ni las otras, miserables, que buscan alguna ventaja politiquera. Todo el tiempo que tengo debo dedicarlo a hacer, a cuidar y a tratar de saldar la deuda fundamental que esta ciudad tiene con todos y cada uno de los familiares de las víctimas de la mafia, de la violencia que nunca serán anónimos”.
Para culminar subrayó el mandatario: “Este es quizás el momento más grave que nos toca vivir en nuestra historia. Les pido a todos y cada uno que salgamos juntos a decirle al país y al mundo que esta ciudad hermosa no se rindió nunca, que Rosario no se va a rendir jamás. Que no vamos a dar ni un paso atrás, y que vamos a ganar. No será fácil. No será de la noche a la mañana. Otra vez nos toca atravesar tempestades. Pero lo dije, lo diré siempre y lo dirán los hijos de nuestros hijos: nunca subestimes la fuerza de la gente buena de Rosario, porque Rosario siempre puede. Arriba Rosario”.
Transporte y otras materias
Luego de hacer un repaso sobre obras públicas Javkin habló sobre los proyectos que enviará al Concejo vinculados a la higiene de la ciudad o la creación de un parque industrial y distintos avances en relación a trámites digitales, asistencia alimentaria, salud —donde hizo referencia a la importancia de prevenir el dengue—, urbanización y materia cultural. Dedicó un ítems a la iluminación led, y a la instalación de un “chip de monitoreo en los dispositivos que le permita a las fuerzas de seguridad rastrear la ruta de las economías delictivas”, aseguró.
También hubo definiciones en cuanto al transporte público de pasajeros: días atrás Javkin usó las facultades otorgadas por el Concejo que le permite digitar el aumento del boleto llevándolo a 700 pesos, en la misma semana que mataron al azar cuatro trabajadores, tres de los cuales eran choferes de servicio público. Por eso mismo debió postergar la apertura de sesiones en el Palacio Vasallo.
Javkin hizo un análisis y dijo: “El problema del transporte no es un tema de un gobierno. Tenemos que hacer malabares para sostenerlo, cobrando más de lo que nos gustaría y menos de lo que realmente haría falta para que el sistema funcione como debería. El transporte en crisis no es un tema ´Rosario´. Pasa en todo el país y todos los intendentes de las ciudades, sin distinción de partidos, estamos peleando para que se entienda de una vez que el interior merece tener un transporte de calidad”, aseguró.
Y recordó la suba del precio del combustible, de las unidades, la falta de Fondo Compensador de Transporte que generó una pérdida de 600 millones de pesos mensuales y la falta de distribución del impuesto al combustible a los que Rosario aportó algo más 892 mil millones de pesos al Estado Nacional.
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