El juez federal Claudio Bonadio rechazó este miércoles los pedidos de excarcelación de los empresarios argentinos Hugo y Mariano Jinkis, involucrados en el escándalo de corrupción de la FIFA, aunque les concedió a ambos la prisión domiciliaria.
Fuentes judiciales informaron a la agencia Noticias Argentinas que el magistrado impuso una caución de 4 millones de pesos para Hugo y otra de 8 para su hijo Mariano.
De esta manera, los empresarios enfrentarán ahora el proceso de extradición solicitado por la Justicia de EEUU.
La decisión del juez fue recibida por los Jinkis, que fueron trasladados especialmente a Tribunales para ello, e incluso se presentaron en el tercer piso, donde Bonadío tiene su despacho, con familiares quienes aguardaron la decisión junto con un grupo importante de abogados.
Los empresarios se presentaron la semana pasada ante el pedido de captura con fines de extradición solicitado por EEUU, al ser acusados por tres cargos de asociación ilícita a raíz de supuestos pagos de sobornos de la empresa Full Play a entidades de fútbol.
El tercer argentino involucrado es Alejandro Burzaco, exCEO de Torneos, quien se entregó en Italia y está detenido en ese país.
Los Jinkis, a poco de ser detenidos, pidieron la prisión domiciliaria: Hugo por tener 70 años, la edad límite a partir de la cual están autorizados, sumados a los problemas de salud que adujo; su hijo Mariano para poder tener un trato frecuente con los abogados de los EEUU a fines de hacer frente a la causa penal que tramita en ese país.
“Que siendo los mismos en ambos casos, tanto la necesidad de asegurar sus personas, como el proceso judicial en el cual son requeridos, no se avizora por qué debiera optarse aquí por un más gravoso método de cautela que el utilizado por la República de Italia”, en referencia a Burzaco, consideró Bonadío.
“Debe destacarse que tramita aquí y a la fecha, solo un pedido de arresto preventivo con fines de extradición a EEUU, con lo cual no puede percibirse riesgo procesal alguno en el sentido concreto de perjudicar la investigación llevada a cabo en dicho país, a partir de su detención domiciliaria”, indicó el magistrado.
Sobre Hugo, el juez tuvo en cuenta que “padece de patologías respiratorias, metabólicas, cardiovascular coronaria, digestiva colónica, oftalmológicas, hipoacusia total izquierda, prostática, artrósica y en el aspecto psico-pisiquiatrico hace 30 años es objeto de tratamiento por la pérdida de audición” por lo que “resulta por demás atendible al momento de acceder a lo peticionado”.
Las condiciones de la prisión domiciliaria que fijó para ambos el juez es la prohibición de salida del país, la entrega de sus pasaportes, y la colocación de pulseras electrónicas tal cual requirió al Servicio Penitenciario Bonaerense, lo que “coadyuvará al efectivo cumplimiento de la permanencia” de ambos, y también presentarse todos los viernes en la sede del juzgado.
La prisión domiciliaria de Hugo será en un domicilio de San Isidro, en tanto que Mariano en Los Cardales.
Por la mañana, cuando ya desde las 9.30 los abogados de los Jinkis aguardaban la resolución, el fiscal Eduardo Taiano había dictaminado por la excarcelación aunque dejó a resolver por parte del juez y sólo reclamó la imposición de una fuerte caución.
Los Jinkis se entregaron a la Justicia luego de varios días de estar prófugos y de fracasar, tanto por parte del juez de primera instancia como por la Cámara Federal, que les concedan la eximición de prisión.
Comentarios