La oleada de huelgas por el drástico plan de ahorro en Grecia continúa hoy con la suspensión del transporte marítimo, ferroviario y un paro de los médicos, que sólo atienden urgencias en los hospitales públicos.
En este primer día de mayo, en el que se conmemora el Día del Trabajo, los ferrys no circulan y está previsto que sólo parta un tren en cada dirección, informó la radio estatal griega.
Los sindicatos convocaron, para este mediodía, a manifestaciones en el centro de Atenas y en otras ciudades, y se teme que se repitan los enfrentamientos que ya se produjeron en la capital, donde un grupo de manifestantes hizo explotar una bomba molotov contra el cuerpo de un policía antimotines, en violentas protestas desatadas debido a la crisis financiera y económica helénica.
El gobierno griego se propone ahorrar 24.000 millones de euros, dado su acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE).
Funcionarios griegos afirmaron que es el único modo en el que Atenas podrá acceder a la ayuda crediticia del FMI y de los países del euro por un monto de 120.000 millones de esa moneda durante los próximos tres años.
El programa de ajuste hace pie en un congelamiento de salarios, la supresión de pagos extraordinarios a funcionarios públicos, el aumento de la edad jubilatoria de 61 a 63 años, un aumento del IVA, del 21 por ciento al 23 ó 25 por ciento y el incremento del impuesto en los cigarrillos, bebidas alcohólicas y combustible.
También se informó que se incrementarán los impuestos en grandes inmuebles, autos de lujo, yates y los altos salarios.
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