José Odisio
Descartados Heinze, Berizzo y Vojvoda, con muchas dudas que hay una respuesta positiva de Sebastián Beccacece, la dirigencia leprosa analiza alternativas ofrecidas, como Javier Sanguinetti, Darío Franco, Diego Osella e incluso Ramón Díaz. Y en el mientras tanto, hay un partido por los puntos, que tal vez no impacte tanto en lo inmediato, pero que puede tener valor en el futuro.
El interinato de Adrián Taffarel resiste a partir de la victoria agónica ante Independiente. Quedan seis partidos y la idea de los directivos es que el DT aguante en el banco hasta el final de torneo. Pero está claro que los resultados serán el sustento de esta continuidad. Por eso el partido ante Unión de esta tarde, justo antes de un receso por elecciones nacionales, puede ser importante para conseguir más tiempo para negociar con un nuevo entrenador.
Taffarel debe cambiar. La expulsión de Marcos Campagnaro lo obligaba al menos a una modificación, pero el regreso de Cristian Lema es una buena noticia para la defensa y tal vez haya una variante más. Nico Castro estuvo en duda por un estado febril, aunque al final se recuperó y sería titular. Pero el entrenador pensó en la semana en sumar a Francisco González o Román Bravo, y uno de los dos ingresará por Marcos Benítez.
Cambiar de nombres no garantiza una victoria, pero al menos apunta a una postura más ofensiva, con un esquema 4-4-2 que tendrá por afuera a dos carrileros con vocación de ataque, uno será Comba, el otro Panchito o el pibe Bravo.
La llegada del nuevo entrenador se dilata, y era lógico. Apuntar a nombres de peso podía ilusionar al hincha, pero encontrar negativas era una posibilidad. Ya hay un “no” de Heinze, Berizzo y Vojvoda, y la única chance que queda de las originales es Beccacece. Según Astore responderá esta semana, aunque parece difícil. Y entonces hará falta tiempo para analizar otras opciones. Y ese tiempo sólo lo darán los buenos resultados.
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