“Un millón y medio de personas, entre ellas 800.000 niños, se encuentran atrapadas por un bloqueo inhumano e ilegal. Esto es un desastre humanitario y económico”, dijo Ging en la sede de la ONU en Nueva York, informó la agencia de noticias DPA.
Israel impuso el bloqueo en febrero de 2006 cuando Hamas ganara las elecciones legislativas palestinas y lo intensificó en junio de ese año luego del secuestro de un israelí aún cautivo en Gaza por miembros de ese grupo islamista. Pero en junio pasado, Tel Aviv aceptó suavizar el embargo y permitir la entrada de más productos y materiales.
“Al mismo tiempo, en los últimos meses demostraron que los avances son posibles y una ganancia para ambas partes. También Israel ganaría levantando el bloqueo”, dijo Ging y remarcó que el 80% de las personas en la Franja de Gaza viven de las ayudas.
El funcionario de la ONU señaló que “antes del bloqueo el 70% aún ganaba su dinero por sí mismo. Apenas hay ya economía y quien quiere hacer algo no tiene el material necesario para ello”.
El territorio necesita, por ejemplo, 100 escuelas nuevas con urgencia y “queremos construirlas, pero debido a las limitaciones sólo alcanza para seis”, denunció Ging. Gaza está superpoblada y miles de casa están reducidas a escombros y alrededor del 90% del agua no es potable para las personas.
Como un dato favorable, el jefe de la UNRWA destacó que mejoró de forma perceptible con la flexibilización del bloqueo.
“Las tiendas vuelven a estar llenas. Esto también tiene ventajas para Israel, porque lo que antes pasaba por contrabando a través de los túneles, pasa ahora de forma controlada por los puestos de paso”, señaló.
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