Paola Cándido
Hace 15 años que Ariel Vijarra y Damián Pighin son pareja. Se casaron hace siete años cuando en 2012 el Congreso aprobó la ley de Matrimonio Igualitario. El deseo de ser padres fue madurando en la relación. Pasaron momentos de angustia y desazón, después de seis años de espera los llamaron desde el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Ruaga). Les avisaron que podrían ser padres de un bebé de 28 días. Hoy son el primer matrimonio igualitario de Santa Fe en adoptar. Luego llegó su segunda hija: Victoria. Sus experiencias los llevaron a volverse militantes de los derechos por la igualdad y crearon la ONG Acunar Familias. Busca ser espacio de información para futuros padres y madres adoptivos. Intentan acompañarlos en todo el proceso y luchar por los derechos de las familias conformadas. “También estamos trabajando en un proyecto de ordenanza de crear una oficina de Información, Contención y Ayuda al Adoptante (Icad) y así poder trabajar junto con el Ruaga”, contó Vijarra a El Ciudadano.
Para la pareja de padres hay distintas maneras de amar y formar una familia. “Ninguna es mejor que la otra. Son distintas. Por eso hay que educar en base a las diferencias, inculcando el respeto, el valor de la familia y la inclusión de todos”, aseguró Vijarra.
Ver crecer a sus hijas es uno de los placeres que comparte la pareja. “No hay diferencias entre adoptar y tener un hijo biológico”, agregó Vijarra, quien preside la ONG. Es que el verdadero amor no necesita una carta de presentación o una prueba genética. “Nuestras hijas tienen nuestro ADN porque adquieren nuestros modismos. Se ríen como yo, se enojan como Damián, disfrutan y viven sin temor. El amor a los hijos es inexplicable”, sumó el hombre.
El espacio
Vijarra explicó que aún con el avance de los mecanismos en Santa Fe las adopciones todavía deben mejorar en cuanto a incluir personas del mismo género. Por eso crearon la ONG. “Es la primera creada para acompañar y contener a los futuros padres adoptivos. Muchas familias desisten de la posibilidad de adoptar por la desinformación y se terminan disolviendo. El Estado está ausente y no se garantizan los derechos de los niños y de las niñas”, sostuvo el padre.
Otro de los objetivos de Acunar Familias es ayudar a los futuros padres adoptivos en todo el proceso, desde la inscripción, el seguimiento de los casos a través de charlas abiertas con invitados del Registro Único Provincial de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Ruaga), jueces de familia y testimonios de padres adoptivos, entre otros.
“La idea es impulsar y luchar por el derecho de las familias conformadas para que puedan gozar de licencias por maternidad y paternidad. También para que los chicos puedan estar incluidos en las obras sociales y seguir conquistando derechos que no existen ante una ley con falencias que no contempla a las familias adoptivas”, resumió el presidente de la ONG. Y concluyó: “El camino de la adopción es largo y difícil. Las leyes están y nos amparan. Nosotros tenemos que exigirlas”.
Oficial
Viajarra presentó hace dos años un proyecto de ordenanza en el Concejo Municipal para la creación de una Oficina de Información, Contención y Ayuda al Adoptante (Icad). Dependería de la Municipalidad de Rosario. “Pretende concientizar sobre el verdadero objetivo de la adopción y que existen otros modos de ser padres, como por ejemplo, poder adoptar a chicos con capacidades diferentes que también esperan una familia y merecen ser hijos”, remarcó.
“Necesitamos abocarnos a las familias que deciden pasar por este camino para protegerlas y que no decaigan durante el proceso. Impulsamos la lucha para que no pierdan los derechos, para concientizar y darle una mirada positiva”, resumió Vijarra.
“Muchos dudan cuando proponemos adoptar a un grupo de hermanos por la crisis”
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