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Mutilación genital: hospital de Rosario redujo 10 veces la cantidad de lesiones

Lo hizo el Roque Sáenz Peña en los últimos diez años. El corte en la zona de la vagina no tiene justificación científica y es considerado una forma de mutilación y una violación a los derechos humanos de las mujeres

Jornada sobre mutilación femenina en Rosario

El Hospital Roque Sáenz Peña, de la zona sur de Rosario, logró bajar 10 veces en la última década la tasa de episiotomías, el corte en la zona de la vagina que es considerada una forma de mutilación femenina y una violación a los derechos humanos de las mujeres. Entre 2009 y 2019 el porcentaje de estas lesiones se redujo del 33 a 2,7 por ciento. Con estos datos, el Roque Sáenz Peña se posicionó como el primer hospital en Argentina en lograr reducir las prácticas de incisiones vaginales en las parturientas. “Antes se realizaban porque suponían que facilitaban el parto. Hay que entender y atender la salud de la mujer en forma integral y desterrar las prácticas violentas: la episiotomía es una de ellas”, explicaron profesionales de la salud.

Los datos fueron dados a conocer por médicos y médicas de la maternidad del hospital público municipal en el marco del Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina. Este jueves la secretaría de Salud Pública organizó una charla sobre el tema. “Las episiotomías -incisión quirúrgica en la zona del perineo femenino, que comprende piel, plano muscular y mucosa vaginal- hoy no tienen justificaciones científicas. Lamentablemente la realidad en Occidente dista de esa recomendación y esto es porque hay estructuras anquilosadas en la formación de los médicos que no están visibilizadas”, aseguró a Télam el jefe de Cirugía Toco Ginecológica del hospital Roque Sáenz Peña, Enrique Mesa.

Por su parte, Gustavo Baccifava, jefe de Atención Integral de la Mujer del mismo centro de salud, aseguró que en ese hospital se realizan anualmente un promedio de 2000 partos. Hace diez años había una tasa del 33 por ciento de episiotomías, y hoy esa tasa alcanza al 2,7 por ciento. “Si tenemos en cuenta que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja lograr al menos una tasa del 10%, el 2,7 alcanzado en nuestra maternidad nos posiciona ante el mundo como el primero en Argentina en haberlo logrado”, apuntó el médico ginecólogo.

También en la Martin

En la Maternidad Martín, otro centro de salud pública municipal, según datos proporcionados a Télam por el jefe del Servicio, Edgardo Abalos, las tasas de la práctica de episiotomías se viene reduciendo año a año. “En 2019 se han atendido un total de 3.156 partos y solo un 18 por ciento de las parturientas fueron sometidas a una episiotomía, nuestra idea por protocolo es reducir esa tasa en cada parto”, aseguró el jefe médico.

Para Mesa, uno de los impulsores de las jornadas de reflexión para médicos, médicas y profesionales de la salud sobre la temática que se desarrollaron este viernes en Rosario, la episiotomía es considerada hoy en día una mutilación que viola los derechos humanos. “Antes se realizaban porque suponían que facilitaban el parto. Hay que entender y atender la salud de la mujer en forma integral. Hay que desterrar las prácticas violentas y la episiotomía es una de ellas”, analizó.

Remarcó que no hay evidencias científicas de que no practicarla lentifique ningún proceso de nacimiento, ni tampoco hay evidencia científica de que realizarla facilite los procesos. También aclaró que tampoco sirve para evitar desgarros: “Hoy sabemos que la episiotomía agrava la posibilidad de los desgarros. En casos extremos el médico deberá evaluar hacer una cesárea pero nunca una episiotomía”.

Consultado sobre las consecuencias, dijo que son múltiples y dolorosas tanto físicas como psíquicas y las calificó como una tragedia. “Una de las definiciones de la mutilación son todas las prácticas quirúrgicas que se hacen sobre los genitales de la mujer sin una justificación médica. Si entendemos hoy que la episiotomía no tiene una justificación médica entonces estamos hablando de una mutilación”, explicó.

Al marcar la relación entre la mutilación de genitales femeninos que se practican en otros países por cuestiones religiosas, sociales y culturales, el médico fue contundente: “La episiotomía es una mutilación limpia, la de los médicos, es la de la salud, y es imperdonable”.

En esa línea, el ginecólogo rosarino se quejó de sus pares que siguen usando esa “vieja práctica”, y consideró, “que los médicos deben formarse correctamente porque hace 20 años que la ciencia viene hablando del tema”.

Una de cada cuatro mutilaciones se hacen en centros sanitarios

Un estudio de UNICEF, cuya publicación coincide con el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, denunció que de una de cada cuatro niñas y mujeres víctimas de la mutilación genital femenina la sufrieron por parte del personal sanitario. Son alrededor 52 millones en todo el mundo.

La proporción de afectadas por la ablación a través de servicios médicos es el doble de alta en las adolescentes de 15 a 19 años con un 34%, en comparación al 16% de víctimas de 45 a 59 años.

“La mutilación autorizada por el médico sigue siendo una mutilación. Los profesionales sanitarios cualificados que practican la ablación violan los derechos fundamentales, la integridad física y la salud de las niñas”, dijo la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore. “La medicalización de la práctica no la hace más segura, moral o defendible”.

UNICEF destaca que el incremento de la mutilación genital femenina se debe a la creencia errónea de que los peligros de realizarla son de salud, y no una violación fundamental de los derechos de la niña.

Actividad de reflexión

Este jueves en el Cemar hubo una jornada de reflexión sobre el tema promovida por el Área de Salud Integral de la Mujer del Hospital Roque Sáenz Peña.

La Asamblea General de la ONU designó esta fecha como el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina con el objetivo de generar un día de concientización, para ampliar y dirigir los esfuerzos mundiales hacia la eliminación de estas prácticas que traen consecuencias nocivas para miles de mujeres en el mundo. Si bien se relaciona a la mutilación femenina a una práctica de ablación que se concentra en cerca de 30 países de África, Oriente Medio y Asia meridional, habitualmente se olvidan las prácticas que se llevan a cabo durante la asistencia durante el parto.

Desde la maternidades municipales, en esta fecha se ha puesto atención especial a la práctica de episiotomías durante el parto como una forma más de mutilación genital. “Estos espacios de reflexión son muy importantes ya que permiten tomar conciencia sobre las técnicas que actualmente se siguen utilizando en distintas partes del mundo que no mejoran los procesos de cuidados y que además son mutilaciones. En Rosario tenemos una amplia experiencia en nuestras maternidades en el respeto de las prácticas que garantizan los derechos de la mujer en el marco del parto respetado”, afirmó Leonardo Caruana, secretario de Salud Pública.

La episiotomía es una forma de mutilación genital que provoca consecuencias físicas y subjetivas en las mujeres, por lo que es urgente desterrarlas. “En este sentido, es importante resaltar que el Hospital Roque Sáenz Peña, a través del Área de Salud Integral de la Mujer, viene trabajando desde hace años en las prácticas del parto respetado y bajó de un 80 por ciento de partos con episiotomías a un 2,5 por ciento. Entre otras cosas, porque se respetaron los tiempos de las mujeres durante el parto, evitando de esta manera desgarros y otras consecuencias”, destacó Daniel Teppaz, coordinador de la Red de Salud Sexual y Reproductiva municipal. El objetivo es evitar las episiotomías en su totalidad, y que la práctica se reserve para casos de extema necesidad. En ámbas maternidades municipales se registró una disminución notoria del número de episiotomías desde que las maternidades Martin y Roque Sáenz Peña, junto con el CREP (Centro Rosarino de Estudios Perinatales), participaron de un estudio multicéntrico a nivel mundial donde se demostró que dicha práctica no tiene indicación en todos los partos.

Para promover su erradicación es necesario realizar esfuerzos coordinados y sistemáticos en los que participen las comunidades en torno a la concientización sobre derechos humanos, igualdad de género y educación sexual integral.De la jornada de reflexión participaron representantes de la Secretaría de Salud Pública, del CREP y del Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES). La misma tuvo por objetivo debatir sobre el tema entre servicios de salud, organizaciones de la sociedad civil y espacios académicos a fin de promover la eliminación de esta práctica como forma rutinaria de intervención en el parto.

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