El actor británico Roger Moore murió este martes a los 89 años debido a un cáncer, según anunció su familia. Es la primera muerte de un intérprete del agente 007.
Moore fue Bond en siete películas de la saga. Sustituyó a Sean Connery en el papel, que mantuvo entre 1973 y 1985, y se convirtió en el actor que más veces interpretó el personaje creado por Ian Fleming. Antes ya había alcanzado la fama mundial gracias a las series Dos tipos audaces.
El británico fue, a la vez, el actor que asumió y dejó el papel del espía en edad más avanzada: debutó en el rol con 45 años y colgó traje y pistolas con 57, cuando, tal como admitió, las chicas Bond con las que mantenía romances en las películas podían ser sus hijas, o incluso nietas.
Vive y deja morir, El hombre de la pistola de oro, La espía que me amó, Moonraker, Sólo para sus ojos, Octopussy y Panorama para matar son sus siete papeles de Bond.
Más allá de sus papeles más conocidos, su carrera cinematográfica cuenta con más de cincuenta films y apariciones televisivas, desde aquel centurión que interpretó en César y Cleopatra (1945) hasta Sherlock Holmes, en una película para la pantalla pequeña de 1976.
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