Cinco tiros resonaron el último domingo a la tarde en la esquina de Pedro Uriarte y Esquivel, en la zona norte. Mirta se asomó por la ventana del primer piso de su casa para ver qué ocurría y se encontró con su hijo de 19 años tendido sobre la vereda en un charco de sangre. El muchacho fue trasladado a un hospital, donde recibió asistencia médica pero murió poco después de ingresar. Parala Policía, las características del hecho hablan de un ajuste de cuentas.
“¿Vos cuántos tiros escuchaste?”, preguntó una mujer de pelo rojo a la dueña de una granjita del barrio Casiano Casas. “¿Cinco? Yo también, pero qué me iba a imaginar”, volvió a decir la clienta al oír la respuesta.
Según contaron las vecinas a El Ciudadano, las detonaciones se oyeron el domingo a la tarde. “No me animé a salir a la calle hasta que escuché los gritos de Mirta, y la fui a consolar”, dijo la propietaria del comercio con desconfianza.
De acuerdo con el relato de las mujeres, tras escuchar los disparos, Mirta, que vive en una casa de dos pisos ubicada en Pedro Uriarte y Esquivel, se asomó por la ventana de la planta alta, pero jamás imaginó lo que iba a encontrar. Tendido en la vereda, en medio de un charco de sangre, estaba su hijo, Eduardo Nahuel Domínguez, de 19 años.
Al cierre de esta edición, los datos que circulaban sobre cómo había ocurrido el hecho era escasos: dos sujetos en moto pasaron por el lugar y efectuaron los disparos dejando a Domínguez malherido. Sin embargo, desde la comisaría 10ª, que tiene jurisdicción en la zona, prefirieron no dar información del hecho a El Ciudadano.
El joven fue trasladado hasta el Hospital Alberdi. Desde allí, una ambulancia del Sies los llevó al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde le diagnosticaron dos heridas de arma de fuego en la espalda y otra en el lado derecho del hemitórax. Enseguida la víctima fue sometida a una operación, pero falleció cerca de las19.50 acausa de las lesiones.
Una fuente cercana a la investigación explicó que al cierre de esta edición,la Policíacontinuaba buscando a los sospechosos, que permanecían prófugos.
El hecho es investigado por el Juzgado de Instrucción en turno, con la colaboración de la comisaría 10ª y dela Brigadade Homicidios.
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