El presidente uruguayo, José Mujica, volvió a cuestionar ayer al gobierno de Cristina Kirchner por los límites que aplica a las importaciones, al afirmar que esa política comercial se parece a la “de 1960”, porque “cada vez se cierra más”.
“Creo que la Argentina tiene un proyecto, y tiene todo el derecho a tenerlo, al estilo de 1960. Creen que solucionan los problemas y cada vez se van cerrando más”, dijo el mandatario en una entrevista que le concedió al diario brasileño Zero Hora.
“Puedo entender si esta es la política general de todo el Mercosur, pero cerrarse hacia los mismos países del Mercosur a mí me parece que quita el sentido “, cuestionó Mujica, que de esta forma volvió a evidenciar el malestar de su gobierno hacia las medidas de comercio exterior dispuestas por la administración argentina.
Esta vez lo hizo en medio de un nuevo momento de tensión entre ambos países por el conflicto por la pastera UPM (ex Botnia) que recrudeció semanas atrás luego de que Mujica aceptara el pedido de la empresa para aumentar su producción, lo que generó rechazo en el gobierno argentino.
Con todo, el jefe de Estado oriental sostuvo que, a pesar de que Uruguay y la Argentina son socios en el Mercosur, no hay margen para “intervenir” en una decisión que corresponde a la autonomía de un gobierno.
Y contrastó la situación rioplatense con el buen vínculo con Brasil, país que –aseguró– “defiende la relación” bilateral con Uruguay.
Esta no es la primera vez que el presidente uruguayo se muestra en contra de las políticas del gobierno de Cristina Kirchner, ya que en varias ocasiones manifestó su descontento con las barreras comerciales que adoptó la Argentina.
El viernes 1º de este mes Mujica ya había cuestionado la política “insular” argentina y había señalado que “lo único que termina haciendo es precisamente perjudicar a la integración, hacer añicos el Mercosur”.
“Una de las cosas que enseña la historia es que siempre, desde tiempos de la colonia, los intereses porteños, los intereses que se anudan económicamente y políticamente al manejo del puerto de Buenos Aires tuvieron siempre una actitud durísima de oposición por todos los medios al puerto de Montevideo”, había dicho el mandatario uruguayo en su audición radial semanal.
“Es una eterna lucha que en estos tiempos de globalización y cuando el mundo está creando bloques por encima de los países tradicionales, es una historia que debiéramos con inteligencia poder remontar”, agregó.
El presidente se refería así a una resolución de la Argentina dispuesta en aquellos días que prohíbe que el trasbordo de cargas de exportaciones originadas en puertos argentinos se realice en países del Mercosur con los que no tiene acuerdos marítimos, lo que generó fuerte preocupación en Uruguay, donde operadores preveían pérdidas millonarias.
“No acompañamos la visión de que un país en la defensa de los legítimos derechos de su gente tenga que afectar a otro del Mercosur, sino que debemos de buscar salidas conjuntas y salidas de integración”, había dicho Mujica.
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