Los 1° de Mayo las trabajadoras y los trabajadores celebramos. Y se podría preguntar, legítimamente, si es justo hablar de celebración cuando, a cuatro meses del inicio de año, todo lo que aparece en nuestro mundo es una clara política antiobrera, donde lxs trabajadxres quedan claramente excluidxs de manera brutal, producto de una práctica antipueblo. Llueven los despidos, los cierres de empresas, el desempleo. Crecen los tarifazos, las iniciativas legislativas para la reforma laboral a la baja, y así, la pobreza que se extiende sin freno. Para sostener este modelo crecen en proporción inversa las mentiras de la clase política empresarial a cargo del gobierno actual. Es que el país está en manos de quienes siempre hicieron grandes negocios, con cuentas off shore, hambreando a chicos y ancianos, robando la salud de las mayorías, de quienes llaman fertilizantes a los agrotóxicos sin importar a quién le toca morir envenenado. Sin embargo, pese a este cuadro criminal, los enemigos de la clase trabajadora no podrán con nosotrxs. Es por eso que salimos a la calle, a gritar. A reclamar y resistir contra este plan de destrucción planificada. Porque estamos convencidos que debemos desterrar del poder a esta clase política ociosa, que tiene el sólo objetivo de aprovecharse de las riquezas ajenas, entiéndase por ello no sólo los capitales económicos, sino también la naturaleza, la cultura y nuestra construcción simbólica. En este contexto, por demás de adverso, hacemos nuestras las propuestas de construir un mundo mejor que nos incluya a todxs. Creemos en nuestra fuerza y por eso celebramos. Es el movimiento obrero y el pueblo organizado, que ha dado a la patria sus mejores militantes, el que ahora resiste y lucha por un país más justo. Hoy otra vez la historia nos convoca. Ni nos lavamos las manos ni miramos para otro lado. Como siempre, lxs trabajadxs nos hacemos cargo de nuestra responsabilidad. Sin estridencias ni poses cinematográficas. Desde la militancia sindical entendemos del dolor del otro como propio. Así, avanzamos. Y por eso celebramos. Con los ojos radiantes de esperanza dispuestos a desafiar todas las tempestades.
*Secretario General del Sindicato de Prensa Rosario. Secretario Adjunto de CTA de los Trabajadores de Santa Fe
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