Datos que dio a conocer el municipio días atrás en torno al nivel de facturación por sector a lo largo permitieron tener un panorama bien claro de quiénes “ganan” y “pierden” con el modelo económico actual. El sector que más crece (siguiendo la línea de algo que ya sucedía) sigue siendo el financiero, con los bancos a la cabeza. En el otro extremo (marcando un cambio en relación a años atrás), el que cae más fuerte es la industria, con la metalmecánica y el rubro textil como los rubros más afectados.
Como ya fuera publicado por este medio, la actividad económica cayó en Rosario durante el año 2016, según los datos definitivos recopilados por la Agencia Municipal de Inversiones y Proyectos Estratégicos.
El informe, que se entrega mes a mes, mide la facturación de las empresas locales en base a la recaudación del Derecho de Registro de Inspección y lo coteja con los niveles de inflación. La Agencia detectó que los ingresos de los establecimientos habilitados en la ciudad llegaron a 182.235 millones de pesos entre enero y diciembre 2016, casi un 34 por ciento más que en el mismo período del año anterior en términos nominales. A valores constantes, descontada la inflación, la cifra representó una retracción de 3,21 por ciento en la actividad.
En ese marco, la industria fue la actividad que más se derrumbó en la ciudad durante 2016, marcando un cambio de tendencia con lo que sucedía años atrás. La facturación a valores corrientes creció apenas 21 por ciento en el año, 13 puntos porcentuales por debajo del promedio y muy lejos de la evolución de los precios.
Al interior del sector, la rama metalmecánica, la más importante a nivel local, es una de las que peor la pasó; registró entre enero y diciembre pasado un aumento del 15,80 por ciento de su facturación a valores corrientes. Es decir, en términos reales cayó casi 20%.
Otro sector fabril, como el textil, registró la evolución más baja del total, con una caída real de cerca del 30%.
En el extremo opuesto, el sector de servicios privados facturó a valor nominal en 2016 un 47 por ciento más que el año anterior, muy por encima del promedio y con un aumento de la actividad en términos reales del 13 por ciento.
El análisis de la Agencia de Inversiones recuerda que el crecimiento de este rubro es una tendencia que se sostiene desde los últimos tres años. En particular, la rama financiera (es decir, los bancos) muestra un alza cada vez más pronunciada; en términos reales tuvo un crecimiento en los ingresos del 20% en relación a 2015.
El vicepresidente de la Asociación de Industriales Metalúrgico de Rosario, Sergio Vacca, entregó cifras similares. Dijo que según estimaciones de la entidad la merma real rondó el 9% en 2016.
“Y en lo que va de 2017 no hubo demasiados cambios. Hay algunos sectores puntuales, como la línea blanca, la producción de maquinarias agrícola, los servicios industriales para el polo aceitero o rubros vinculados a la actividad petrolera que están mejor. Pero en general la actividad no levanta”, señala el dirigente.
Esa información fue ratificada esta semana a nivel nacional por propio Indec. Según el Estimador Mensual Industrial (EMI) que elabora el organismo oficial, la actividad manufacturera cayó en el país un 6% el mes pasado en comparación con igual mes de 2016 y acumula una contracción interanual del 3,5% en el primer bimestre.
Para Vacca hay una retroalimentación negativa que influye en la economía y atenta contra el desarrollo. “Las inversiones están tardando porque no se crece. Hay cierta incertidumbre. El gobierno tiene un programa de obra pública importante para motorizar, pero que eso empiece a funcionar va a llevar un tiempo más”, sostiene el vicepresidente de AIM.
En tanto, en torno a la comparación de la industria con los bancos, Vacca recalcó que las entidades financieras vienen “ganando desde hace años”. “Que les va muy bien no es nada nuevo. Con el anterior modelo económico sucedía lo mismo”, destacó.
Igual, el dirigente admitió que las altas tasas que sostiene el gobierno nacional y el tipo de cambio “planchado” conspiran contra la industria y alienta la inversión financiera.
El informe industrial del Indec marca 13 meses en baja
El informe del Indec marca que la industria acumula 13 meses en baja. El último incremento había sido del 1,2%, en enero de 2016, para iniciar entonces una serie declinante que continúa. El dato negativo, a su vez, es que hasta febrero la industria acumulaba tres meses recortando su caída (4,1% en noviembre, 2,3% en diciembre, 1,1% en enero).
El análisis sectorial muestra contracciones en los principales rubros. Según el Indec, cayeron la industria textil (22,5%), la automotriz (18,6%), la refinación de petróleo (9,2%), la industria metálica (9,3%), el tabaco (7%), los productos minerales no metálicos (7,2%), la fabricación de caucho y plástico (5,9%), la producción de alimentos (4,2%), la industria del papel y el cartón (2,4%) y la industria química (4,1%).
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