Khagendra, que mide 62 centímetros y pesa unos cinco kilos, se reunirá a fines de esta semana en Italia con representantes del célebre libro, quienes verificarán su estatura como parte del procedimiento para grabar su nombre en las páginas de los récord Guinness, explicó a Efe su padre Roop Bahadur Thapa Magar.
El viaje del pequeño Khagendra, el primero que realiza fuera del subcontinente surasiático, ha sido patrocinado por una cadena de televisión.
El joven fue ‘descubierto’ hace cuatro años en la ciudad nepalí de Pokhara por un hombre de negocios, Min Bahadur Pun, quien ha creado una fundación, que él mismo preside, a nombre del pequeño Khagendra, que se ha convertido en una celebridad.
Desde entonces, el joven ha hecho apariciones estelares en ferias y eventos en los que los organizadores pagan por contar con su presencia.
«Solicitamos (la entrada) en Guinness hace unos cuantos años pero nos dijeron que para ser oficialmente reconocido como el hombre más bajo del mundo tiene que alcanzar la edad de 18», dijo a Efe Pun, quien acompaña a Khagendra en su viaje a Europa.
Pun oyó hablar del joven Khagendra por primera vez en 2006 y se lo llevó a su casa durante seis meses, posteriormente creó la fundación con el objetivo de que se le otorgue el título de hombre más bajito del mundo, reconocimiento que en la actualidad recae sobre el chino He Ping Ping, que mide 73 centímetros.
Nacido en una aldea remota del distrito de Baglung, en el oeste nepalí, Thapa Magar cumplirá 18 años el próximo mes de octubre.
«Pesaba 600 gramos y cabía en la palma de la mano cuando nació», rememoró a Efe su madre, Dhan Maya, quien tuvo al pequeño cuando apenas era una adolescente.
Dhan Maya, de 30 años y su marido, Roop Bahadur, de 36, son propietarios de una tienda de verduras y se casaron siendo muy jóvenes por iniciativa personal, lo que supuso un auténtico desafío a la tradición nepalí de celebrar un matrimonio concertado por las familias.
«No hay antecedentes en la familia de alguien tan pequeño», dijo el padre de Thapa Magar, que tiene otro vástago de 13 años con peso y altura normales.
Khagendra, que no empezó a caminar hasta la edad de ocho años y dejó de crecer a los 11, puede expresarse, pero sólo los más allegados logran descifrar sus palabras.
«Desde que lo conozco su discurso ha mejorado un poco», dijo Pun.
Y aunque según los médicos el pequeño goza de buena salud, los cambios de estación afectan especialmente a Khagendra, que es propenso a los resfriados.
«Nadie creía que viviría, pero yo nunca pensé que no lo haría. Estaba impaciente porque creciera y me decepcionó que no lo hiciera, pero lo he querido desde que nació», dijo su madre, quien recordó que el parto de se hijo fue complicado.
Khagendra siempre ha sido activo, le gusta jugar y correr y durante los dos últimos años ha asistido a la escuela, pero no se relaciona demasiado con sus compañeros por miedo a que le hagan daño o se rían de él, dijeron sus padres.
Una de sus aficiones preferidas es la televisión además de las películas, que consume sin separar los ojos de la pantalla, aunque en los últimos tiempos nuevas inquietudes empiezan a rondar a Khagendra, que recientemente ha manifestado su deseo de casarse.
«Probablemente le ha llegado la edad», dijo Roop Bahadur, para añadir que su hijo siente predilección por las mujeres de estatura convencional.
«Si le enseño chicas pequeñas y le pregunto si se quiere casar con ellas me dice que no», agregó.