Un hombre de 32 años fue asesinado y su hermano, de 27, herido de gravedad en la tarde de anteayer en barrio Godoy. Según informaron fuentes del caso, el homicidio tuvo lugar en medio de una disputa entre vecinos. Por un lado, allegados a la víctima aseguraron que el homicida tenía a mal traer a todo el barrio y agredió a las víctimas luego de que éstas le respondieran un insulto. En paralelo, el confeso asesino, quien se entregó a la Policía luego de perpetrar el hecho, dijo a los pesquisas que él se defendió luego de que lo quisieran balear. Vecinos de barrio Godoy denunciaron a El Ciudadano un acuerdo entre el matador y uniformados de la seccional 32ª para que el caso quede impune.
Ezequiel Mansilla, de 27 años, tuvo que asistir al velatorio de su hermano Juan Manuel con vendajes en la cabeza y brazo derecho. Ayer por la tarde, cuando charló con este diario en la puerta de la casilla de pasaje 1709 al 4800, donde familiares y amigos despedían los restos del fallecido, aún temblaba. Tartamudeaba, de bronca y de dolor. A él también lo balearon, pero tuvo suerte. Las perdigonadas de la escopeta Itaka con la que mataron a Juan le pegaron en la mano y la cabeza. Pero zafó. Con las fuerzas que le quedaban, tragó saliva y dolor, para poder contar lo que ocurrió: “Estábamos con mi hermano en la calle cuando pasó un vecino, Gabriel Alberto A. Él siempre se hace el duro y cuando estuvo enfrente de nosotros nos preguntó qué mirábamos. Nosotros le dijimos que no joda y ahí se armó el quilombo”, explicó la víctima y a la vez testigo.
Según habitantes de la zona, mientas los Mansilla y el otro hombre discutían, a eso de las 15.30, llegó Miguel A., padre de Gabriel, con una Itaka en la mano. “Tomá, hacete respetar, que estos giles no se pasen de listos. Matalos”, reconstruyeron.
Siempre de acuerdo con vecinos de barrio Godoy, luego de esto Gabriel tiró hacia atrás el cargador del arma y les disparó a los hermanos.
Diferente fue la versión que dio el matador, minutos después de concretar el hecho, mientras se entregaba en la comisaría 32º. El hombre admitió lo que había ocurrido, pero dijo que el arma en realidad era de los Mansilla y que él logró sacársela en medio de una pelea; señalando que les disparó en legítima defensa. De acuerdo con el detenido, la pelea comenzó por un problema menor: dijo que le habían recriminado que su perro les había matado un pollo.
“Esto es todo verso. El viejo del asesino era pirata del asfalto y tiene causas por tráfico, así que sabe cómo moverse con la Policía. Cuando su pibe se fue a entregar, llevó guita, para que aparezca como que se estaba defendiendo”, explicaron allegados a las víctimas.
Lo que sí estaba claro ayer por la tarde es que, luego de la balacera, Juan Manuel Mansilla fue trasladado en un auto particular al policlínico San Martín, que está ubicado a pocas cuadras de donde cayó herido, pero no logró sobreponerse a las heridas y falleció poco después de ingresar. Su hermano Ezequiel recibió curaciones en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez, por una perdigonada que le dio en la cabeza y la mano izquierda. Fue dado de alta ayer por la mañana, para que pudiera despedir a Juan Manuel.
El caso es investigado por la Fiscalía de Homicidios Dolosos, a cargo de Ademar Bianchini durante la semana que terminó ayer.
Asesinado a golpes y cuchillazos en Santa Fe
Un hombre de 55 años fue asesinado ayer a golpes y puñaladas en una casa del barrio Nueva Pompeya de la ciudad de Santa Fe y por el crimen buscan a un sospechoso identificado por testigos, informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió alrededor de las 5 de ayer, en una vivienda situada en inmediaciones de Azcuénaga y Saavedra, en el noroeste de la capital santafesina.
Fuentes policiales informaron que dentro de esa casa fue encontrado asesinado a golpes y puñaladas en el cráneo un hombre identificado como Roberto Leiva (55), quien se sospecha fue atacado durante una fiesta familiar.
A partir de los datos aportados por testigos del crimen, los investigadores identificaron al sindicado homicida, el cual al cierre de esta edición era buscado por personal policial.
El hecho es investigado por efectivos de la seccional 26ª de la Unidad Regional I y de la Policía de Investigaciones, a las órdenes de los fiscales de la Unidad Especial de Homicidios Cristina Ferraro y Jorge Nessier.
CRIMEN EN VILLA LA LATA
Un joven de 24 años murió pasado el mediodía de ayer en el Heca a raíz de dos disparos recibidos en el pecho en la mañana de ayer en villa La Lata, dijeron voceros policiales. La víctima, identificada como Cristian Luna, con domicilio en ese barrio, fue hallada agonizante en Amenábar entre Corrientes y Paraguay al lado de un auto de su propiedad, un Volkswagen Trend, a las siete de ayer, añadieron las fuentes. Allegados a Luna lo trasladaron al Heca, donde lo operaron por los balazos que recibió en el tórax, aunque falleció pasado el mediodía, dijeron voceros del caso. Los portavoces añadieron que la víctima no tenía antecedentes y se investiga si pudo haber sido asesinado en ocasión de robo. El caso es investigado por el fiscal de Homicidios Dolosos en turno con colaboración de la Policía de Investigaciones y la seccional 5ª.
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