Policiales

Femicidio en Salta

Mató a ex pareja en el cumpleaños de 15 de la hija de ambos

Una mujer fue asesinada a puñaladas por su ex pareja en la localidad salteña de Cobos, mientras festejaban el cumpleaños número 15 de una de las hijas de ambos, informaron fuentes policiales y judiciales.


Una mujer fue asesinada a puñaladas por su ex pareja, en la localidad salteña de Cobos, mientras festejaban el cumpleaños número 15 de una de las hijas de ambos, informaron fuentes policiales y judiciales.

Se trata de Ely Sandra Condorí (44), por cuyo femicidio fue detenido Miguel Ajalla (61), de quien se había separado hace un mes aproximadamente tras denunciarlo por los malos tratos a la que la sometía.

El fiscal penal 4 de la Unidad de Graves Atentados de Salta, Ramiro Ramos Ossorio, dijo a Télam que Ajalla fue imputado por “homicidio doblemente calificado, por la relación de pareja prexistente y por femicidio”.

Ramos Osorio detalló que el hombre “se abstuvo de declarar” durante la audiencia de imputación y que luego quedó detenido.

El hecho ocurrió este fin de semana, justamente en la casa de Ajalla, ubicada en la calle Enrique Cornejo sin número, de la localidad de Cobos, que está a unos 40 kilómetros de la ciudad de Salta, en el departamento General Güemes.

Hasta allí había llegado Condorí, quien estaba separada de Ajalla desde hace poco más un mes, debido a los constantes malos tratos que recibía y los hechos de violencia a los que era sometida.

La mujer había regresado al lugar por el festejo del cumpleaños de 15 de una de los seis hijos de ambos.

En un momento dado, Condorí se dirigió a uno de los cuartos de la casa, en la que había convivido varios años con Ajalla, con la intención de buscar un abrigo porque había refrescado.

El hombre, que a esas alturas ya se encontraba en evidente estado de ebriedad, la siguió y aprovechó la soledad de la habitación para mantener una discusión y apuñalar a su ex pareja.

La mujer comenzó a pedir auxilio a los gritos, pero los otros participantes del festejo tardaron en escucharla debido a los ruidos de la celebración.

Cuando los invitados detectaron que algo pasaba y se acercaron a la habitación, la víctima ya estaba muerta, tirada en el piso sobre un charco de sangre emanado por la herida con un arma blanca que había sufrido.