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Matan a un joven de cuatro tiros en ex villa La Lata

La víctima es un hombre de 27 años que estaba acusado de un homicidio ocurrido en marzo pasado.

Un muchacho de 27 años fue ultimado anteanoche de cuatro disparos por desconocidos que abrieron fuego contra él cuando estaba en la vereda de Amenábar al 1400, en la ex villa La Lata. Sobre la víctima pesaba una orden de captura por no regresar de una salida transitoria de la Unidad Nº 3, de Zeballos y Riccheri, y estaba señalado como el autor material de los cinco tiros que el 13 de marzo pasado terminaron con la vida de Oscar Alberto Suárez, de 42 años. A su vez, el joven también estuvo implicado en el violento robo a un motociclista de 25 años en diciembre de 2007, quien al resistirse recibió dos tiros por la espalda que lo dejaron parapléjico. Para los investigadores, se trató de un ajuste de cuentas.

“Ya sabía que lo iban a matar, porque ayer (por anteayer) a la tarde lo corrieron a los tiros por el barrio, pero no lo agarraron. Anduvo toda la tarde con un revólver. Anoche escuché los tiros, pero salí cuando ya estaban los patrulleros de la Policía”, contó una vecina del pasillo de Amenábar 1471, adonde se encontraba la víctima fatal, identificada como Federico Baiz, de 27 años, al momento del crimen.

“Lo que cuentan las personas del barrio es que había bronca entre Baiz y una barra de pibes que se juntan en la esquina de Amenábar y Paraguay”, detalló la mujer. De acuerdo con este mismo relato, ese grupo fue el mismo que lo sacó a los tiros, durante la tarde del sábado de la esquina de Corrientes al 2900.

Según contaron los vecinos a El Ciudadano, anteanoche Baiz estaba en la puerta del pasillo cuando el mismo grupo de personas se le acercó, y se generó una discusión. En ese momento, un auto paró y los sujetos que viajaban en el interior del vehículo intentaron calmar la bronca. Después, en el barrio se escucharon los tiros, los del auto huyeron a toda velocidad y Baiz cayó en la vereda herido de cuatro balazos.

“Le pegaron dos en el pecho y uno en cada pierna”, detallaron algunos testigos, quienes agregaron que enseguida los amigos de la víctima lo metieron adentro del pasillo y al notar que estaba muerto lo llevaron al hospital Español. “Este pibe no es de acá, pero se juntaba con un tal Martín. Ese también la ligó en el tobillo”, detallaron los vecinos

Sin embargo, ésta no es la única versión de cómo sucedieron los hechos. Una muchacha que ayer a la tarde estaba en el lugar donde la víctima fue ultimada a balazos, dialogó con El Ciudadano y dijo que el sábado cerca de las 23.30, Baiz estaba parado en la vereda cuando un automovilista detuvo la marcha de su vehículo en dirección a él. “Se bajó el acompañante, sacó un arma, le disparó cuatro veces y después se fueron en el auto”, explicó la chica.

Por su parte, los investigadores indicaron que en el lugar del homicidio se secuestró una vaina servida calibre 9 milímetros, que correspondería a uno de los tiros que impactaron en el muchacho fallecido. “Por el momento no tenemos identificados a los autores del crimen y tampoco sabemos bien qué fue lo que pasó, porque los testigos no dijeron nada”, dijo una fuente relacionada al caso.

El hecho es investigado por el Juzgado de Instrucción en turno, con la colaboración de la comisaría 15ª.

Una causa tras otra

Baiz había caído a mediados de enero de 2008 durante un allanamiento en su casa de pasaje Maratón al 1900. Es que el muchacho estaba imputado de asaltar el 19 de diciembre de 2007 –junto a otro joven– a Javier Claudio Altamiranda, de 25 años.

Los pesquisas explicaron que en esa oportunidad, Baiz y su cómplice interceptaron a Altamiranda mientras se desplazaba en su moto y, tras amenazarlo con un arma de fuego, le sustrajeron el rodado. Pero la víctima se resistió al asalto y los ladrones le efectuaron dos tiros que le impactaron en la espalda y huyeron. Producto de las lesiones, Altamiranda quedó inmovilizado de la cintura para abajo.

Baiz quedó alojado en la Unidad Penitenciaria Nº 3, de Zeballos y Richeri, pero el año pasado hizo uso de una salida transitoria con la que había sido beneficiado y nunca regresó al penal. Una orden de captura se libró en su contra, pero nunca lo encontraron.

En su etapa de fugitivo, se le achacó un homicidio ocurrido el 13 de marzo pasado en barrio Las Flores. La víctima del crimen fue Oscar Alberto Suárez, de 42 años, quien recibió al menos cinco tiros cuando se encontraba en su casa de pasaje 516 al 6400. El hombre fue trasladado al hospital Roque Sáenz Peña, desde donde fue derivado al Heca y falleció a poco de ingresar.

De acuerdo con la investigación, el ataque ocurrió cuando el agresor se presentó e intentó usurpar la vivienda de Suárez. El dueño de casa salió a cortarle el paso, pero el joven decidió terminar la pelea cuando sacó un revólver calibre 38 y abrió fuego contra los presentes. No obstante, algunas versiones señalaban que las discusiones y encontronazos entre la persona fallecida y el agresor venían de larga data.

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