Ciudad

MILITANCIA OBRERA

Acto de resistencia en La Toma: denuncian “incidentes encubiertos”

EL espacio aloja a 40 organizaciones obreras entre trabajadores, cooperativas y sindicatos, como también a un área de Salud Mental y un centro de día de Diversidad, entre otros.


Militantes y trabajadores del Centro Cultural La Toma, de Tucumán 1349, reafirmaron su resistencia al pedido de desalojo sostenido en la Justicia y denunciaron públicamente que “desde hace semanas en el espacio ocurren incidentes violentos encubiertos, cada vez con más frecuencia”.

El acto de resistencia convocó a cientos de personas este viernes, que analizaron en forma conjunta la forma de mantener el ya emblemático espacio que aloja a 40 organizaciones obreras entre trabajadores, cooperativas y sindicatos, como también a un área de Salud Mental y un centro de día de Diversidad, entre otros.

Carlos Ghioldi, al frente de La Toma, contó que desde hace aproximadamente una semana una mujer entra al lugar a “hacer escándalo” pero hace unos días o hizo con un arma blanca en la mano e intentó agredir a una persona.

“Creemos que en realidad a esta persona le tiran unas monedas para que haga esto, pero detrás están los fondos especulativos que sostienen el pedido de desalojo en la Justicia ya que se quieren quedar con el inmueble”, señaló en diálogo con El Ciudadano.

“No nos vamos a ir del lugar. No nos moveremos y convocamos a todas las organizaciones populares a la utilización militante del establecimiento”, agregó.

Ghioldi sostuvo que “somos un espacio público solidario pero no construido por el estado sino por el propio movimiento obrero”.

Con respecto a los ataques que refirió vienen pasando en el lugar desde hace poco más de una semana enfatizó: “Somos conscientes que hoy estamos ante un gobierno hostil, el gobierno nacional es hostil a esta experiencia, es un enemigo y en ese marco es que redoblamos la lucha. Estamos ante un gobierno inescrupuloso que, al igual que mandan autos a que sospechosamente choquen a personas en los piquetes, nosotros tenemos también operaciones preparadas en nuestra contra para generar incidentes”.

Finalmente, recordó que en más de una oportunidad, “cuando ocurre algún hecho violento la Policía aparece  en nuestro lugar inmediatamente y me lleva a la comisaría a mí”.

“Esto nos obliga mucho más a la ocupación militante porque sólo la militancia consciente puede enfrentar los ataques frontales e inescrupulosos”, concluyó Ghioldi.

Tras el pedido de desalojo, a principios de abril del año pasado el juez Marcelo Quaglia, a cargo del Juzgado en lo Civil y Comercial Nº 14 realizó una inspección en el espacio de Tucumán y Entre Ríos para corroborar la función social y cooperativa que se desarrolla en el lugar.

“Mientras algunos vivos especularon con la evolución de la quiebra, queríamos que el juez venga a hacer un inventario social. Además, dos leyes avalan el proyecto de los trabajadores”, dijo Ghioldi.