Un ex miembro de los comandos de élite nazis SS, de 88 años de edad, fue condenado hoy a cadena perpetua por haber matado a tres civiles durante la ocupación alemana de Holanda.
El juicio a Heinrich Boere se realizó en la Audiencia provincial de Aquisgrán, y es uno de los últimos en Alemania relacionados con crímenes cometidos durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Durante el proceso, el asesino, quien asistió a las 19 sesiones sentado en una silla de ruedas, admitió haber fusilado a los tres civiles holandeses en julio y septiembre de 1944, como miembro de un comando especial y cumpliendo órdenes de sus superiores, según informó la agencia de noticias DPA.
Boere integraba el comando de aniquilación nazi “Feldmeijer”, encargado de tomar represalias contras opositores y miembros de la resistencia contra la ocupación alemana de Holanda.
Los tres civiles fueron asesinados en Breda, Voorschoten y Wassenaar después de una serie de atentados contras las tropas de ocupación. Los hijos de dos de las víctimas estuvieron presentes en el juicio celebrado en Aquisgrán, en el oeste de Alemania. Con su decisión, el tribunal de esa ciudad escuchó la petición de la fiscalía, ya que la defensa había solicitado la absolución.
Boere había presentado una declaración en diciembre en la que explicaba al detalle cómo mató a balazos con un cómplice a los tres civiles, aunque recalcó que en ningún momento creyó o sintió que estuviera cometiendo un crimen.
Antes de ser enjuiciado, el anciano también había confesado en declaraciones periodísticas que había matado gente como miembro de las SS.
Boere fue sentenciado a muerte en ausencia poco después de la guerra en Holanda, aunque posteriormente se le conmutó la pena capital por la de cadena perpetua.
El ex miembro de las SS nunca cumplió la condena porque Alemania no extradita a sus propios ciudadanos.
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