Más de 8 mil hectáreas pasaron de Córdoba a Santa Fe

Como Gibraltar en España o Melilla en África. Así era Colonia Dos Rosas y La Legua: estaba dentro de los límites de Santa Fe pero bajo jurisdicción de Córdoba. La comuna está en el límite de las dos provincias, y el martes pasado se firmó un acuerdo de regularización de límites por lo que pasará a formar parte de territorio santafesino.

Son alrededor de 8.500 hectáreas, algo así como la mitad de la superficie de la ciudad de Rosario, en el departamento San Cristóbal.

Santa Fe inscribirá definitivamente en su territorio los terrenos del departamento San Cristóbal. La zona en cuestión había sido anexada a ese distrito santafesino mediante una ley sancionada por el Congreso Nacional en 1970, pero esa norma nunca se había materializado.

Hugo Frank, presidente comunal de Colonia Dos Rosas y La Legua, a la que pertenece la zona en litigio, explicó a El Ciudadano que la comuna cuenta con unos 400 habitantes. Unos 128 viven en zona rural. Cuando se fundó el pueblo, se incorporaron otros 250. “Es un trámite que comenzó con el ex gobernador Antonio Bonfatti y finalizó tras varios años con un acuerdo firmado entre (su sucesor, Miguel) Lifschitz y su par cordobés Juan Schiaretti. La próxima semana veremos cuáles son los próximos pasos, pero ya es una alegría para nosotros que se hayan fijado los límites”, expresó el mandatario comunal, que ficha en el Frente Progresista y en las elecciones de 2015 renovó mandato y retuvo el cargo que ocupa desde 2001.

 

Una ley ordenaba incorporar la colonia a Santa Fe, pero hasta ahora no se había materializado

La iniciativa que permite ordenar aspectos jurídicos y administrativos beneficia a los habitantes y a la provincia. “Las hectáreas se van a aportar en la provincia de  Santa Fe con los impuestos tributarios y los de producción. Es una tranquilidad para los productores agropecuarios de la zona, ya que al encontrarse fuera de los límites cordobeses muchas veces tenían problemas con las partidas porque no estaban registrados”, explicó Frank.

La localidad se destaca por ser una zona de tambos y con buena producción láctea.

Resta el papeleo. “Es un trámite administrativo que no tiene costo,  pero que llevará tiempo ya que hay que inscribir todos los títulos para que pasen a ser parte de la provincia de Santa Fe y eso es un mundo aparte, porque estas tierras están fraccionadas por parcelas de unas 100 o 110 hectáreas en su mayoría, pero también más chicas”, indicó el jefe comunal.