Marzo: más femicidios que días

“Marzo lleva más femicidios que días. Más femicidios que días”, dijo y repitió este jueves Ofelia Fernández en su primera intervención como legisladora de la ciudad de Buenos Aires. En su discurso se refirió a los recortes que el gobierno de Cambiemos aplicó en materia de la prevención a la violencia a las mujeres en sus cuatros años de gestión en la Nación. “No ayudó el ajuste al presupuesto habilitado para combatir la violencia que se llevan las nuestras”, expresó. A esa realidad no escapa la provincia de Santa Fe, donde en este 2020 ya se cuentan siete femicidios. El número se desprende del relevamiento que lleva adelante Mumalá, que contempla los casos de mujeres asesinadas en contexto de violencia de género. Sin embargo otros registros, como el que sostiene la concejala Norma López, suman a ese número a las mujeres asesinadas en contexto de criminalidad y considera que en enero, febrero y lo que va de marzo los femicidios ascendieron a 14.

El primer femicidio del año en Santa Fe fue el de Florencia Coria, de 27 años. Florencia murió el 8 de enero el en Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) después de 11 días de agonía. El 29 de diciembre, su marido, Cristian Cabrera (43) –a quien había denunciado incansables veces por golpearla desde que se casaron en 2015– la roció con alcohol y la prendió fuego para después encerrarla en la casa en la que vivían en Villa Constitución. Florencia pidió ayuda y llegó al Samco local envuelta en una frazada con su hija de 3 años en brazos y el 90 por ciento del cuerpo quemado.

Gabriela Benítez tenía 33 años y el 18 de enero también murió quemada. Fue en la localidad de Alejandra, en el departamento de San Javier. Fue hallada dentro de un auto que se incendió por completo. Gabriela, que era madre de cuatro niños, estaba acompañada por su pareja, Carlos Ermindo Usprung (65) que salió del coche casi ileso y fue imputado por el femicidio.

El 19 de enero, Daniela Cejas, una trabajadora social de 41 años que era vicepresidenta de la Asociación Civil Generar, desde donde se acompaña a víctimas de violencia machista, fue hallada muerta en la sede de esa institución, en la ciudad de Santa Fe. Los peritajes indicaron que había sido golpeada y ahorcada. Por el femicidio quedó imputado Javier S. que era compañero de trabajo de Daniela y además mantenía una relación sentimental con ella.

María Alejandra Molina, de 44 años, fue asesinada el 23 de enero en una vivienda de barrio Los Tigres, de Villa Gobernador Gálvez. Su concubino, Antonio B., le disparó en la cabeza mientras dormía. Luego intentó suicidarse, pero no lo consiguió y confesó el crimen a uno de los tres hijos que tenía con la víctima.

El quinto femicidio de la provincia tuvo como escenario la localidad de Humboldt, en el departamento Las Colonias. Noelia Oschstadt tenía 41 años y era mamá de dos hijos. El más chiquito, de seis años, vio cuando su papá –Walter W., ex pareja de Noelia desde hacía un año– le pegaba un tiro. Después del ataque, el hombre se entregó en la comisaría y quedó detenido. Fue el 27 de enero.

En febrero se registraron dos casos más. En 10 de ese mes, el cuerpo descuartizado de una mujer fue sacado de las aguas del arroyo Saladillo, adonde había sido arrojado en bolsas de consorcio negras. La víctima no fue identificada hasta principios de este mes: se trataba de María Isabel Ruglio, una docente jubilada de 73 años que vivía en Uriburu al 500. María Isabel alojaba en su casa a Marcelo Alberto “Bebu” F., de 53 años, y a Josefa “Pepi” R. C., de 57 y oriunda de Sevilla, España, que la ayudaban con algunas tareas del hogar, detenidos en base a la principal hipótesis que maneja la Fiscalía: que la pareja la asesinó para quedarse con su casa.

El 18 de febrero, Caren Peralta, una trabajadora sexual de 39 años, fue encontrada muerta a golpes en un departamento de Juan Manuel de Rosas al 2200, en Rosario, que utilizaba junto a una compañera para recibir a los clientes. “La clandestinidad mata”, expresaron desde la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (AMMAR). El femicidio se conoció después de semanas de hostigamiento mediático a las trabajadoras sexuales organizadas sindicalmente para exigir que se reivindiquen sus derechos como trabajadoras.

Estos siete femicidios son los que contempla el relevamiento que lleva adelante Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá), que considera los asesinatos de mujeres en contexto de violencia de género.

Sin embargo, hay otros registros que, con una base conceptual distinta, elevan ese número a 14. Es el caso de relevamiento que lleva adelante la concejala Norma López, que integra a esa lista otros siete crímenes ocurridos en contexto de criminalidad, seis de ellos en Rosario. Se trata de Antonella Albornoz (22), víctima de un ataque a tiros a su familia el 8 de enero en la zona sur; Yanina Beatriz Merlo (26), asesinada a puñaladas en zona noroeste el 13 de enero mientras andaba en bicicleta; Daiana Romina Paiva (26), asesinada a tiros en zona norte en medio de una emboscada; Agustina Thomson (20), baleada en zona norte el 11 de febrero; Florencia Corbalán (21), asesinada junto a su pareja y a su beba de 18 meses, Chelsi Albornoz, el 16 de febrero, cuando recibieron disparos desde una moto; y Gladis Beatriz Altamirano Karlen (43), muerta a golpes en el patio de su casa de la ciudad de Las Toscas, en el departamento General Obligado, en un presunto robo.

A nivel nacional, el registro de Mumalá relevó para los dos primeros meses de este año 43 femicidios en toda la Argentina. En tanto, en el conteo de Norma López los casos ascienden a 60.