Familiares de Franco Casco, el joven que estuvo detenido a comienzos de octubre en la seccional 7ª y que tras sin conocerse su paradero por casi 20 días, apareció flotando en el río Paraná, marcharon en la tarde de este jueves 11 de diciembre por las calles del centro rosarino para pedir el esclarecimiento del caso por el cual no hay avances ni detenidos.
Junto a organizaciones políticas y sociales, caminaron desde la plaza 25 de Mayo, ubicada frente al Palacio Municipal, hasta el frente de la vallada plaza San Martín, en Santa Fe al 1900, donde se ubica la sede Rosario del gobierno provincial.
Frente a la puerta de ingreso a lo que fuera durante mucho tiempo la sede de la policía rosarina, la madre del joven se quejó por la falta de avances en la causa. “Todavía no tenemos nada”, señaló la mujer, quien junto a organizaciones sociales, pidió que la causa sea caratulada como desaparición forzada de persona.
Casco fue detenido el martes 7 de octubre pasado por policías de la comisaría 7ª (su familia dice que fue el 6) y horas más tarde fue liberado en confusas circunstancias que en principio no quedaron asentadas en el libro de guardia, señalaron fuentes del caso.
Luego de casi tres semanas de búsqueda, y tras escuchar decenas de rumores sobre su paradero –entre ellos que fue visto pidiendo ropa casi dos semanas después de estar siendo buscado– su cuerpo apareció flotando en el río Paraná en inmediaciones del parque España.
Su cuerpo estaba casi irreconocible y, según el examen forense, había fallecido al menos dos semanas antes.
La marcha fue convocada para “exigir que la carátula definitiva en el caso de Franco sea la desaparición forzada” y que “se haga pronta justicia con los responsables policiales y políticos”, según informaron los organizadores.
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