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Mal día para pasear el perro

Un hombre fue sorprendido por un ladrón armado que lo obligó a volver a su casa, de donde sacó artículos electrónicos. Luego la víctima fue llevada hasta un cajero y entregó mil pesos. Finalmente fue detenido.

Un hombre de 56 años que vive en un Fonavi de la zona oeste vivió una verdadera odisea en la mañana de ayer al ser sorprendido por un desconocido armado mientras paseaba a su perro. Bajo amenaza de muerte, el ladrón lo obligó a volver a su casa y allí se hizo con varios electrodomésticos, frente a la esposa y el hijo de la víctima. Con el fin de proteger a su familia, el dueño de casa le ofreció al desconocido que lo acompañe a retirar dinero. Tras un raíd por distintos cajeros de la zona, el hombre fue abandonado en la vía pública. El ladrón fue detenido un rato más tarde en las cercanías de un cajero de la zona, donde esperaba sorprender a una nueva víctima.

Como todos los días, Luis salió temprano de su casa, ubicada en inmediaciones de Cochet al 7600, para pasear a su mascota. Mientras caminaba junto al canino, alrededor de las 8, fue sorprendido por un hombre armado que lo obligó a subir a su departamento bajo amenazas, dijeron fuentes policiales.

Una vez en el interior de la vivienda, el ladrón –más tarde identificado como José Manuel M., de 33 años– guardó varios electrodomésticos en una bolsa de dormir. Entre los objetos había un microondas, un DVD y algunas joyas de la mujer.

Pero el dueño de casa notó que el ladrón “estaba muy exaltado”, por lo que luego de varios minutos de diálogo, logró convencerlo de salir de la vivienda. Según fuentes del caso, le propuso llevarlo en su propio auto a retirar dinero de un cajero automático y así resguardar la seguridad de su familia.

Así fue que ambos hombres salieron a bordo de la camioneta Fiat Fiorino blanca de Luis, rumbo al cajero que hay en la estación de servicio de Donado y Córdoba, de donde el dueño de casa sólo pudo extraer mil pesos, pese a tener acredita una suma muy superior. No conforme con el monto, el ladrón hizo subir a un cómplice al vehículo y entre los dos llevaron a Luis por varios cajeros de la zona sin poder extraer más dinero. Los ladrones no sabían que la red que utiliza Luis permite extraer hasta 1009 pesos por día, refirieron las fuentes.

Luego de varios intentos frustrados, los ladrones decidieron hacer un alto en su raíd, por lo que fueron a tomar un refresco en una estación de servicios ubicada en Mendoza y la colectora 25 de Mayo, donde Luis manifestó tener ganas de ir al baño.

Uno de los captores le dejó el arma a su compañero y lo acompañó al baño, adonde Luis simuló un desmayo, pero luego sufrió un ataque de nervios, por lo que comenzó a gritar. Sus alaridos hicieron que ambos delincuentes huyeran del lugar a pie, no sin antes tomar del interior de la Fiorino el dinero sacado del cajero y la bolsa de dormir con los artículos electrónicos.

Con las manos en la masa

Unos minutos después, ya repuesto, Luis llamó a su casa para avisar que estaba bien y que por favor llamaran a la Policía. Pero su hijo le comentó que ya había dado aviso a la subcomisaría 22ª, pero que de inmediato iba a avisar en la seccional que su padre había logrado liberarse y dar el detalle de dónde estaba, dijeron las fuentes.

Pero un llamado anónimo al 911 alertó a la Policía sobre la actitud sospechosa de un hombre en inmediaciones de un cajero ubicado en Donado y Mendoza, por lo que personal del Comando Radioeléctrico llegó al lugar y requisó a José Manuel M., de 33 años, a quien le encontraron entre sus ropas un teléfono celular, otro inalámbrico (que fue sacado de la vivienda de calle Cochet, para evitar que la familia avise del hecho a la Policía), 470 pesos y la tarjeta de débito de Luis, refirieron las fuentes.

El hombre quedó detenido en la subcomisaría 22ª a disposición del Juzgado de Instrucción en turno, mientras que su cómplice y el resto de los elementos robados en la vivienda siguen siendo buscados por la Policía.

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