por Gabriel Pennise
Hace una semana atrás pensar en la continuidad de Leo Madelón como técnico de Central era algo que se asemejaba a una herejía. Pero, inteligente Leo se guardó en Buenos Aires con su familia mientras veía como se derrumbaba el imperio Usandizaga. Ya sin dirigentes, y con elecciones programadas para el 4 de julio los tiempos empiezan a mandar.
Y ahí si apareció como alternativa la continuidad de Madelón, “es la mejor opción” dijo Gonzalo Belloso, acaso la única palabra autorizada de la “comisión consultiva” para opinar de fútbol. Y llegó la explicación, “no queda tiempo para armar un equipo nuevo con técnico incluido”. Además, Madelón ascendió con Olimpo de Bahía Blanca ganando Apertura y Clausura, de la primera B Nacional en la temporada 2007/2008.
Madelón no fue el principal responsable del descenso de Central. Pero sí un importante eslabón en la cadena de desatinos. Plantó mal un equipo para jugar ante un genuino exponente del ascenso como All Boys, cargó de miedos a sus jugadores y el equipo que venía de un par de actuaciones sólida (Estudiantes y Vélez) terminó humillado en el Gigante. Esa es su culpa, pero la cosa no invalidad su capacidad como técnico. Por eso, y ante las circunstancias que rodean los días de Central, aunque no lo parezca, Madelón es la mejor opción.
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