Política

coparticipación

Macri les pidió “un esfuerzo” a las provincias para bajar el déficit

Para Lifschitz, “hay una voluntad común del conjunto de las provincias de contribuir a cumplir metas de equilibrio fiscal”.


El presidente Mauricio Macri se reunió en la Casa Rosada con los gobernadores para presentarles los lineamientos generales del llamado Consenso Fiscal que promueve la Nación con el objetivo central de reducir el déficit de las provincias y del propio Estado nacional. “Un borrón y cuenta nueva en la relación entre la Nación y las provincias”, según definió luego del encuentro el ministro del Interior Rogelio Frigerio.

El gobernador Miguel Lifschitz dijo tras la reunión que “hay una voluntad común del conjunto de las provincias de contribuir a cumplir metas de equilibrio fiscal”, pero aclaró que no hubo intercambio entre los gobernadores y los funcionarios nacionales ya que “la reunión fue de carácter informativo”. No obstante, Lifschitz pudo plantear ante los ministros la necesidad de que haya un trato diferencial desde el punto de vista tributario para dos sectores industriales que son muy fuertes en la provincia: el cervecero y el complejo agroindustrial del biodiésel.

“Se plantean reformas tributarias importantes, como disminuir el impacto de los impuestos distorisivos a la economía”, explicó el gobernador santafesino. “Esto implica disminuciones del impuesto al Cheque y del impuesto de Ingreso Brutos en un proceso gradual de cinco años”. Desde el punto de vista de la provincia, el mandatario socialista puso sobre la mesa “la situación de las empresas fabricantes de cervezas en Santa Fe y también las pymes de biodiésel”, para las que pidió un trato especial.

El primero de los planteos de Lifschitz será atendido por la Nación. Mientras se desarrollaba la reunión con los gobernadores, el Ministerio de Producción de la Nación informó que, al igual que ocurrió con el vino y los espumantes, el proyecto de reforma tributaria será modificado a pedido de los productores de cerveza y no habrá aumento en los impuestos internos (el borrador inicial del gobierno nacional planteaba una suba del 8% actual al 17%).

La reunión celebrada ayer en la Casa Rosada fue para que el gobierno nacional pudiera plantear ante los gobernadores los ejes centrales de las reformas económicas que se empezarán a discutir en las próximas semanas. Por lo pronto, se acordó un nuevo encuentro para el jueves 16 en el que se empezará a abordar la situación puntual de cada provincia en el marco de las reformas que quiere aplicar la Nación.

“La reunión fue de carácter informativo. El presidente y los ministros fueron los encargados de plantear los temas y de hacer una síntesis de las propuestas. Nos van a enviar una documentación más detallada y luego vamos a trabajar activamente para ver en qué podemos acompañar y en qué puntos tenemos diferencias”, agregó Lifschitz.

El objetivo de la administración nacional es bajar un punto el déficit fiscal del 4,2% del PBI previsto para este año al 3,2% en 2018. Es una meta ambiciosa para la cual, según el propio Lifschitz, tiene que haber “un esfuerzo compartido” entre la Nación y las provincias. Para lograr esa meta, se planteó la disminución de los impuestos distorsivos y de Ingresos Brutos y la aplicación de nuevos impuestos nacionales, como gravar la renta financiera y el revalúo de activos.

El ministro de Economía de Santa Fe, Gonzalo Saglione, señaló que “es muy importante que se reconozca debidamente el déficit fiscal que tiene el país y se evalúen alternativas para superarlo y también nos parece importante que el gobierno reconozca el problema de déficit fiscal que tienen las provincias”.

De todos modos, el funcionario provincial se mostró menos optimista que los funcionarios nacionales respecto del plazo de las negociaciones: “Una semana parece un plazo corto para resolver todos estos temas de importancia”.

El gobierno da marcha atrás con el gravamen al vino

El gobierno decidió ayer dar marcha atrás con su intención de gravar al vino y espumantes, y elevar las alícuotas en la cerveza, mientras confirmó que la vitivinicultura seguirá exenta de pagar impuestos internos, lo cual fue celebrado en Mendoza y San Juan.

El proyecto de reforma tributaria impulsado por la administración de Macri proponía elevar las alícuotas en las bebidas espumosas y champaña de 0% a 17%; mientras que en vinos y sidras pretendía aumentar de 0% a 10%. En el caso de las cervezas, el incremento iba a ser del 8 al 17%, aunque ya quedó nulo.

Los gobernadores de Mendoza, Alfredo Cornejo, y de San Juan, Sergio Uñac, habían pedido de manera insistente al gobierno que no gravara el vino, dado que eso podría afectar de manera contundente a las economías regionales. Al finalizar el encuentro, Cornejo –aliado político del gobierno– dijo: “Acabo de tener una reunión con el presidente y me ha confirmado que el impuesto al vino no va al Congreso, así que queda en cero”.

Nación ofrece solucionar el Fondo del Conurbano sin afectar recursos a provincias

El gobierno nacional anunció ayer que se abrió una negociación para solucionar el conflicto por el Fondo del Conurbano sin afectar las cuentas públicas de las provincias y dijo que si se llega a un acuerdo la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, está “dispuesta a retirar su reclamo de la Corte Suprema de Justicia”. De esta manera, la administración de Mauricio Macri propone como prenda de paz la cuestionada iniciativa bonaerense que tanto rechazo producía en el resto de los gobernadores.

El ministro de Interior, Rogelio Frigerio, dijo que la idea es “cubrir de manera gradual el reclamo de la provincia de Buenos Aires” y que sería la Nación la que “mayoritariamente” se haría cargo del financiamiento. La propuesta “no afectará las cuentas públicas provinciales” ya que será la Nación la que se haga cargo del financiamiento, de “manera gradual”, dijo Frigerio.

El gobierno propone derogar el artículo 104 de la ley de Ganancias, que establece que el 36% de lo recaudado por ese tributo no ingresaba a la masa coparticipable y repartía 650 millones de pesos para la provincia de Buenos Aires, con un tope incluido; y el 10% para el resto de las provincias distribuido según el coeficiente de coparticipación.

Ese artículo también destina un 4% para las provincias con necesidades básicas insatisfechas –las que más recibían eran Salta, Misiones y Corrientes–, otro 20% para financiar a la Ansés y un 2% restante al fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN).

A partir de esa derogación, todas las asignaciones pasarían a la masa coparticipable, que aumentaría a 230 mil millones de pesos, mientras que para no desfinanciar a la Ansés, el gobierno pretende que el 100% de lo recaudado del impuesto al cheque pase bajo la órbita del sistema previsional a cargo de la Ansés.

“El gobierno nacional compensará a las provincias por el monto que pudieran haber perdido producto de las dos medidas anteriores (artículo 104 e impuesto al cheque). Todas las provincias conservarán la misma cantidad de recursos que tienen al día de hoy, y la provincia de Buenos Aires será compensada en 20 mil millones de pesos”, señalaron desde el ministerio de Rogelio Frigerio.

La solución al conflicto se da en la misma semana que Vidal eligiera enviarle un fuerte mensaje a sus pares al poner el reclamo por el Fondo del Conurbano en el centro de la escena con la difusión de su reunión con el titular de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti.