Política

Sorpresiva decisión

Macri anunció que Pichetto será su vice en la formula presidencial de Cambiemos

El presidente Mauricio Macri estará acompañado en la fórmula nacional de Cambiemos por el senador nacional del bloque Justicialista Miguel Ángel Pichetto, en una sorpresiva decisión adoptada a más de una semana del cierre de listas y en paralelo a las negociaciones de Sergio Massa


El presidente Mauricio Macri estará acompañado en la fórmula nacional de Cambiemos por el senador nacional del bloque Justicialista Miguel Ángel Pichetto, en una sorpresiva decisión adoptada a más de una semana del cierre de listas y en paralelo a las negociaciones de Sergio Massa para confluir con el peronismo.

El propio Macri, pasadas las 16, y cuando los rumores sobre esa fórmula no hacían más que multiplicarse, confirmó a Pichetto como su candidato a vicepresidente y aseguró que “es un hombre de Estado”, a quien respeta “por su compromiso con la Patria y las instituciones”.

“Es un hombre de Estado, que con el correr de los difíciles años de gobierno supe conocer y respetar por su compromiso con la Patria y las instituciones”, expresó Macri en un mensaje que subió en las redes sociales.

El mandatario nacional agregó: “Los argentinos nos enfrentamos a una oportunidad histórica de consolidad nuestra democracia. En las próximas elecciones decidiremos si queremos vivir en una república o volver a un autoritarismo populista”.

Postergación radical

Se trató de un anuncio sorpresivo ya que fuentes del propio gobierno en los días previos consideraban que las mayores chances para ocupar la candidatura a vicepresidente estaban en algún dirigente de la UCR, uno de los socios del PRO en la alianza oficialista, e incluso no descartaban que permaneciera Gabriela Michetti.

La semana pasada, en una entrevista televisiva, Pichetto había sugerido que ante  un posible balotaje entre Macri y Alberto Fernández  él se inclinaría por el actual mandatario.

De esta forma, como antes lo hiciera Cristina Kirchner cediendo su candidatura presidencial a Alberto Fernández y negociando con Massa, Cambiemos amplió su espacio con la incorporación de un peronista histórico que desde su función como jefe del bloque Justicialista en la Cámara alta trabajó junto a los ex presidentes de ese espacio Carlos Menem y Néstor y Cristina Kirchner.

Varios dirigentes de la UCR venían reclamando al gobierno ampliar su base de sustentación de cara a las elecciones, negociando la llegada de dirigentes de otras expresiones políticas más allá de los actuales socios de Cambiemos.

“Macri me ha honrado”

El senador nacional Miguel Pichetto afirmó ayer que el presidente Mauricio Macri lo “ha honrado” al elegirlo como compañero de fórmula y contó que aceptó “sin dudas”, al tiempo que se encuadró rápidamente detrás del mandatario y destacó que es el que “tiene la autoridad, el poder y los votos”.

“Macri me ha honrado, inmediatamente le dije que sí, no hubo dudas. Y además, cuando hay dudas vale más el coraje”, expresó Pichetto en la conferencia de prensa que dio en el Salón Eva Perón del Senado, poco después de que se confirmara su candidatura por Cambiemos.

Renuncia al bloque

El senador rionegrino indicó que la decisión de aceptar el ofrecimiento fue “personal” y anunció su renuncia a la presidencia del Bloque Justicialista del Senado, al tiempo que destacó que “el vicepresidente tiene que acompañar al presidente”, y remarcó que el jefe de Estado “es el que tiene la autoridad, el poder y los votos”.

De esta manera, intentó aventar cualquier posible suspicacia en torno a su presencia junto a Macri en un eventual segundo mandato, posición que reforzó al señalar que conoce “cuáles son los límites de un vicepresidente”, en lo que se leyó, además, como un tiro por elevación a la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Kirchner.

Al justificar su decisión, Pichetto señaló que comparte con el gobierno “una visión capitalista, de un capitalismo moderno”, y su rechazo al kirchnerismo, el cual expresó al reiterar que “nunca es bueno que vuelva el pasado”.

“El debate es más profundo, tiene que ver con la democracia, con que si vuelve el pasado nuestro destino es Venezuela, que vuelva el autoritarismo, tiene que ver con la situación internacional, que la Argentina vuelva a ocupar un lugar en el mundo”, indicó.

Consultado por la prensa sobre el cambio que implica pasar de la oposición al oficialismo, subrayó: “He sido siempre un opositor democrático, propositivo, a diferencia de otros que proponían que todo volara por el aire, que cuanto peor, mejor”.

No obstante, afirmó que su desembarco en el oficialismo no implica un cambio de postura en temas como los pedidos de desafuero contra la senadora Cristina Kirchner, sobre lo cual afirmó: “Mantengo la misma posición que he tenido siempre”.

“La idea del presidente fue tomarme como soy y mantengo mi postura. Estoy en contra de la prisión preventiva anticipada. Mi aporte también será una mirada sobre el sistema judicial argentino”, agregó.

Respecto de la expectativa de la UCR por ocupar el lugar que finalmente ocupará él, Pichetto destacó la “relación personal” que mantiene con dirigentes del radicalismo como el ex senador Ernesto Sanz y el diputado José Cano, quien estuvo presente en la conferencia.

De hecho, reveló que habló con Sanz y con el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, además de comunicarle su decisión de aceptar el ofrecimiento de Macri a “muchos gobernadores” peronistas, entre ellos sus hasta ahora socios en Alternativa Federal Juan Schiaretti y Juan Manuel Urtubey, y también al líder del Frente Renovador, Sergio Massa.

Por otra parte, valoró como “aciertos” del gobierno la “política internacional” y en materia de seguridad, al tiempo que dijo que “hay que mejorar” en el ámbito económico y agregó: “La Argentina de la pobreza extrema, de la ideología del pobrismo no es la que me contiene”.

“El desafío con los pobres es sacarlos de la pobreza y del plan, recuperar al sujeto trabajador”, agregó el senador y, en este sentido, se expresó nuevamente a favor de un acuerdo programático entre distintos sectores y señaló que “está claro que a partir del 10 de diciembre un gobierno de un partido solo en minoría no sirve para el país”.

De todos modos, remarcó que “las prioridades” de un eventual segundo gobierno de Macri “las va a fijar el Poder Ejecutivo nacional. La autoridad de un gobierno está en la figura del presidente”.

Un gobernador frustrado, con larga historia en el peronismo

Miguel Pichetto tiene un largo pasado en la política del PJ. Nació en Banfield y tras sus estudios de abogado en La Plata se radicó en Río Negro, donde se dedicó al fuero laboral. Fue legislador provincial desde 1987 hasta 1993, cuando fue elegido diputado nacional. Allí se transformó en una de las espadas legislativas del menemismo y en esa condición logró renovar su mandato hasta 2001.

En mayo de 2001 fue electo senador nacional. Con la llegada del kirchnerismo, se transformó en el defensor en la Cámara alta de todos los proyectos del gobierno de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

Con la llegada de Cambiemos al poder, votó positivamente muchas de las iniciativas del gobierno de Mauricio Macri, como por ejemplo la reforma previsional, el blanqueo y el acuerdo con los fondos buitre, entre otras.

La gran frustración

Su gran frustración es la gobernación de Río Negro, donde intentó llegar tres veces y no lo logró. En las elecciones de 2007 perdió con el candidato apoyado por el presidente Kirchner, Miguel Saiz (Radical K), 46,1% a 40,2%. de los votos. En 2011 se quedó fuera de la gobernación de la provincia a manos del fallecido Carlos Soria, por ese entonces titular del PJ rionegrino. En las elecciones de 2015 se presentó como candidato a gobernador nuevamente, perdiendo las elecciones con Alberto Weretilneck (52,7% a 33,9%), quien se presentaba a la reelección por Río Negro.

De cara a las presidenciales, en los últimos meses se transformó en uno de los armadores del espacio peronista Alternativa Federal, donde participó hasta ayer.

Negociación contrarreloj

Para ellos no hubo sorpresa. El propio Miguel Ángel Pichetto confirmó que, antes de aceptar ser el candidato a vicepresidente de Macri, habló telefónicamente con Juan Manuel Urtubey y con Juan Schiaretti. Quizá por eso, el salteño y el cordobés reaccionaron de inmediato a que se diera a conocer públicamente la noticia que sacudió al mundo político y ratificaron su pertenencia a Alternativa Federal, el espacio que crearon el año pasado junto a Sergio Massa y el propio Pichetto, con la esperanza de convertirse en la “tercera vía”, capaz de sortear la polarización en las próximas elecciones.

“Hacemos por Córdoba inscribirá la alianza para participar de las elecciones con candidatos a diputados nacionales propios, que defiendan los intereses de nuestra provincia. Además, ratificamos nuestra pertenencia a Alternativa Federal, coalición que se inscribirá nacionalmente”, expresó Juan Schiaretti, con más estrategia que desconcierto.

Al mismo tiempo, desde el entorno de Roberto Lavagna acusaban impacto y se esperanzaban con un escenario bien distinto al que proyectaban hasta ahora. Casi golpeándose el pecho, los operadores políticos del ex ministro de economía afirmaban que tenían razón cuando decían que en Alternativa Federal no había ninguna intención seria de terminar con la “grieta”. Ahora, sin Massa y sin Pichetto, abren la puerta al diálogo a pocas horas del cierre de las alianzas. Y, por qué no, apuran los trámites para un posible acuerdo con Urtubey y Schiaretti, al que se sumarían contentos los socialistas santafesinos, los progresistas del GEN y los radicales abandonados a la suerte por su partido. “Después de lo que estamos viendo en los últimos días, nada es imposible”, coinciden todos.

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