Mundo

Brasil

Lula durmió en prisión y la Policía reprimió a manifestantes

Acompañaban al ex presidente desde la puerta de la Superintendencia de la Policía Federal de Paraná, hay nueve heridos. “Vamos a instalar una resistencia cívica, una vigilia cívica para que salga rápidamente”, dijo Gleisi Hoffmann


“Vamos a instalar una resistencia cívica, una vigilia cívica para que salga rápidamente”, dijo Gleisi Hoffmann.

El ex presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva pasó su primera noche en prisión desde que se presentó detenido en una sala usada de celda de la Superintendencia de la Policía Federal de Paraná, en la ciudad sureña de Curitiba.

“Lula está bien, llegó bien a su lugar detención y vamos a instalar una resistencia cívica, una vigilia cívica para que salga rápidamente de prisión, de esta situación de prisión política”, dijo este domingo la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann. En tanto, frente a la prisión miles de manifestantes acompañaron a Lula, lo que desató una  feroz represión policial que sumo unos nueve heridos.

Lula durmió en una sala usada de dormitorio por comisarios, que fue acondicionada para cumplir su condena, en la que habrá una televisión.

A las 7 de la mañana de este domingo la policía le llevó el desayuno: café con leche con pan y manteca, de acuerdo al régimen interno de las celdas de este edificio policial.

En el ámbito judicial, la defensa del ex presidente espera que el Supremo Tribunal Federal aborde el miércoles próximo acciones que cuestionan la jurisprudencia que indica que con fallo de cámara de segunda instancia un condenado debe ser detenido.

El Supremo Tribunal podría declarar inconstitucional ese entendimiento, ya que la Constitución brasileña permite la cárcel, si es que no hay vidas en riesgo, una vez finalizadas todas las instancias judiciales.

La máxima corte del país aplicó en 2016 la jurisprudencia al calor de las presiones de la comunidad policial y jurídica que trabaja en la Operación Lava Jato, como se llama a los casos de corrupción que involucran a la constructora Odebrecht y la petrolera Petrobras, controlada por el Estado.

El tribunal regional de Porto Alegre defendió que el juez  Sergio Moro, quien instruyó la causa, tome decisiones “excepcionales” porque la investigación conocida como Lava Jato es diferente que el resto de los procesos por corrupción.

En un acuerdo de 2016, el tribunal que ratificó la condena a Lula justificó las acciones de Moro, cuestionadas por los juristas, al afirmar que estas causas como las de Lula “traen problemas inéditos que exigen soluciones inéditas”.

Heridos

Al menos nueve personas resultaron heridas con disparos de bala de goma debido a la represión policial a manifestantes a favor del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva frente a su lugar de detención en Curitiba, en el sureño estado de Paraná, fronterizo con Misiones.

El incidente ocurrió en las puertas de las Superintendencia de la Policía Federal en Curitiba poco después de la llegada de Lula para cumplir su condena de 12 años y un mes de prisión por corrupción en la Operación Lava Jato, en medio de una gran conmoción política nacional.

“La Policía Federal comenzó a reprimir”, dijo el presidente del Partido de los Trabajadores (PT) de Paraná, Florisvaldo Fier, conocido como Doutor Rosinha.

Según la Policía del estado de Paraná, los incidentes ocurrieron debido a la amenaza de invasión al edificio de la Policía Federal. Nueve personas, entre ellas un niño, debieron ser hospitalizados para atención médica, aunque ninguno de gravedad, según los bomberos de Paraná.

El sábado, el juez Ernani Mendes Silva Filho prohibió manifestaciones y acampes en los alrededores de la sede de la Policía Federal de Curitiba en la que quedó alojado Lula, porque esas protestas “pueden ocasionar trastornos a los vecinos de la región y grave lesión al orden de la seguridad”.

Mendes Silva Filho advirtió que la “aglomeración de personas y movimientos que pueden ocasionar trastornos a los vecinos de la región y grave lesión al orden de la seguridad”.

La Policía no reprimió a los manifestantes a favor de la Operaición Lava Jato que protestaban frente al edificio de la Policía Federal contra Lula.