Alvaro Arellano
Los últimos datos oficiales de la industria (mayo 2021) presentaron mejoras interanuales en la producción y Uso de Capacidad Instalada (UCI), aunque no así respecto al mes anterior. El optimismo que pueden despertar algunos números respecto a 2020, aún no generan una sensación de repunte real ya que la comparación se establece con una época castigada por los parates que ocasionó la pandemia. Ante la expectativa por ver cómo se desenvuelve el sector durante los próximos meses, y pese a la cautela que demandan las comparaciones, el dato positivo para el sector llegó a partir de un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), en el que indicaron que entre mayo del año pasado y abril de 2021, la industria incorporó a 31.875 trabajadores y trabajadoras. Esto equivale a más del triple de las pérdidas laborales que se registraron en el rubro durante la etapa más dura de las restricciones.
Si bien la lógica de trazar un paralelismo entre la actualidad y la etapa más restrictiva de la pandemia generó cuestionamientos y dudas, los números que reflejan una importante recuperación del empleo en la industria resultan incuestionables. Buena parte de este fenómeno estuvo motorizado desde Santa Fe, que junto a otras cuatro provincias de la región pampeana componen el 64,4% del total de asalariados registrados del país.
Los datos oficiales del Instituto nacional de Estadísticas y Censos (indec) sobre la producción industrial en mayo, pusieron de manifiesto dos realidades. Por un lado, una mejora interanual del 30,2% para el quinto mes de 2021 y del 23% acumulado hasta el momento, comparando con el mismo período de 2020. Por otra parte, al revisar el dato desestacionalizado, es decir respecto a abril, se registró una caída del 5% para la producción manufacturera.
La tendencia se replicó con los datos correspondientes al Uso de la Capacidad Instalada (UCI), que en mayo llegó al 61,5%, superando holgadamente el 46,4% registrado durante el mismo mes del año pasado. Aunque al compararlo con el mes anterior, queda en evidencia una leve caída, ya que en ese momento la UCI alcanzó el 63,5%.
Recuperación de empleos
Mientras que oficialismo y oposición intentan explotar el dato que mejor les permite apuntalar sus discursos de cara a las elecciones de medio término, desde el Instituto Argentino de Análisis Fiscal, una asociación civil sin fines de lucro que provee un espacio abierto para la discusión económica, publicaron un informe económico donde expusieron que la industria recuperó más del triple de los puestos de trabajo formales perdidos en el peor momento de 2020.
El cálculo realizado con datos del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTEySS) parte desde el nivel mínimo alcanzado por el empleo asalariado formal en la industria manufacturera durante mayo de 2020, momento en el que las restricciones por la pandemia provocaron un freno de mano a la economía.
Durante ese segundo trimestre del año pasado llegaron a perderse 9.100 puestos de trabajo formales en el sector. Con la reapertura gradual de actividades, en el cuarto trimestre ya se habían generado 3.294 nuevos puestos, un dato que incluso superaba a la generación de empleo durante el mismo período de 2019.
El último dato actualizado, indicó que entre ese piso alcanzado en mayo de 2020 y abril de 2021 se generaron 31.875 puestos de trabajo, un crecimiento del 2,9% entre un período y otro. Es decir que no solo se recuperó la cantidad de empleos perdidos en la industria manufacturera, sino que se incorporó a más del triple de esa cifra de desocupados (9.100).
De acuerdo al informe, el podio de rubros que generaron mayor cantidad de empleo en el cuarto trimestre de 2020, momento en que se dio el puntapié para la recuperación, fueron Alimentos (3.649), Radio y Televisión (3.555) y Productos de caucho y plástico (2.222). Le siguieron Maquinaria y Equipo (2.104) y Productos Químicos (1.515).
Entre las industrias que registraron mayores pérdidas se ubicaron Edición (-1.952), Otros productos de metal (-2.533) y Confecciones (-2.989).
Por región
La actividad se desarrolla de distintas maneras en diferentes regiones del país, un fenómeno determinado por las estructuras productivas y los niveles de informalidad. Los datos dieron cuenta de la injerencia de la región pampeana, conformada entre otras provincias por Santa Fe, para la generación de trabajo. En el cuarto trimestre de 2020 concentró el 64,4% del empleo formal privado industrial.
Otro dato relevante tiene que ver con la participación de la industria manufacturera en el empleo formal asalariado de cada región. En el último trimestre del año pasado tuvo una mayor participación en la región Pampeana (23,5%) y en Cuyo (19,4%), seguido por NOA (15,3%) y NEA (15,0%). Con menor participación aparecieron la Patagonia (12,4%) y CABA (11,3%).
Al analizar ese mismo período a nivel país el rubro Alimentos concentró el 33,2% del empleo en la industria manufacturera, seguido por productos químicos (8,9%) y otros productos de metal (7,4%). Maquinaria y Equipos es importante en la región Pampeana (6,9%) y Patagonia (9,6%), Automotores en la Pampeana (8,1%). Productos de Caucho y Plástico en la Pampeana (6,6%). Productos textiles en CABA (8,4%), NEA (7,7%) y NOA (8,7%). Otros minerales no metálicos en Cuyo (6,3%). Confecciones en CABA (8,5%). Edición en CABA (7,6%). Madera en NEA (23,2%) y radio y televisión en la Patagonia (17,7%).
Últimos datos
En vísperas de campañas electorales, los datos oficiales sobre la industria comenzaron a ser un recurso estadístico para cada discurso. Las circunstancias de la pandemia provocaron que al comparar, año contra año, los últimos números no dejen del todo claro si los números actuales son síntomas de una mejora real. Mientras desde el oficialismo ya hablan de un repunte, la oposición más dura sostiene que los datos actuales se están cotejando con la severas caídas que provocaron las restricciones del año pasado.
En mayo de 2021, el índice de producción industrial manufacturero (IPI manufacturero) mostró una suba de 30,2% respecto a igual mes de 2020. El acumulado enero-mayo de 2021 presentó un incremento de 23,0 % respecto a igual período de 2020.
Pero el índice de la serie desestacionalizada mostró una variación negativa de 5,0% respecto al mes anterior y el índice serie tendencia-ciclo también registró una variación negativa de 0,7% respecto al mes anterior.
La tendencia se replica con los datos de la Utilización de la Capacidad Instalada, ya que el dato de mayo marcó un nivel de 61,5%, muy por encima al registrado en mayo de 2020 (46,4%). Aunque al comparar con abril de este año, cuando el porcentaje de la ocupación fue del 63,5%, se repite la caída.
Mientras desde la oposición ponen en cuestionamiento el rigor sobre la comparación respecto al año anterior, el oficialismo confía en un repunte, que no solo supere los datos que dejaron lo peor de la pandemia, sino que marque una tendencia hacia una estabilidad posibilitada por la nueva normalidad de la actividad económica.
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