Franco Trillini
“Tu l’as dedans”. Esa es la forma en la que el traductor de google interpretó la famosísima frase que inmortalizó Diego Armando Maradona tras la sufrida victoria sobre Perú en el Monumental, donde Argentina se impuso 2-1 con un gol agónico de Martín Palermo y selló su clasificación al Mundial de Sudáfrica 2010. Y a casi 15 años de esa polémica conferencia de prensa en la que el 10 disparó con munición gruesa a sus detractores, esa máxima de D10S viene de maravillas para encasillar la patética actuación de algunos hinchas del Paris Saint Germain para con Lionel Messi.
La relación entre el astro rosarino y los fanáticos del PSG nunca fue buena, pero empeoró muchísimo tras el Mundial que Argentina le ganó a Francia en Qatar, al punto de que lo terminaron abucheando muchas veces, tanto en el Parque de los Príncipes como en otros estadios alrededor de Francia. Y si bien Messi ya se fue del club, algunos hinchas continúan enojados con el mejor jugador del mundo, hoy en el Inter Miami de Estados Unidos.
Y fue justamente durante el viaje que el plantel que dirige el Tata Martino hizo hace poco para enfrentar al New York Red Bull en el reinicio de la Major League Soccer (2-0 con un gol de Leo) que se dio una situación totalmente insólita: tres personas se acercaron a las inmediaciones del estadio de que utilizan las Garzas cuando juegan de local en Miami y desplegaron una bandera con un mensaje en contra del 10.
“Messi: nos deshicimos de los groseros”, era el mensaje que los hinchas franceses difundieron en redes sociales, el cual no tardó en virilizarse entre los fanáticos del PSG, quienes celebraron semejante acto cobarde en respuesta a las recientes palabras que el astro sobre su presente en Estados Unidos, quien admitió estar “feliz en Miami” tras “haber tenido dos años complicados en París”.
El brasileño Neymar y el italiano Marco Verratti también fueron apuntados por los ultras del club galo como responsables de la falta de resultados a nivel internacional de su equipo, que nunca logró ganar la Liga de Campeones de Europa a pesar del exorbitante presupuesto económico del grupo de inversión qatarí que lidera Nasser Al-Khelaifi.
Maradona lo sabía mejor que nadie, aunque lamentablemente el más grande de todos ya no está para decírselo: la tenés re adentro franchute.
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