Mundial de Rugby 2019

El Ciudadano en Japón

Los Pumas perdieron y quedaron al borde de la eliminación

Argentina cayó categóricamente ante Inglaterra 39-10 por la tercera fecha del Mundial y ahora sólo resta el duelo del miércoles con Estados Unidos. La esperanza albiceleste está en ganarle a las Águilas, que Francia pierde ambos cotejos (Tonga y la Rosa), sin sumar bonus y allí se dará el milagro


Por: Lisandro Olearo, enviado especial

Un equipo Puma deslucido. Es cierto que jugó 63 minutos con un hombre menos, pero igualmente en ningún momento pudo equiparar fuerzas con Inglaterra, que se llevó el triunfo por 39-10 en el marco de la tercera fecha del Grupo C del Mundial de Japón. Los rosarinos fueron titulares y jugaron todo el cotejo para el combinado nacional.

La expulsión de Tomás Lavanini cambió todo, los errores estuvieron presentes y el equipo nunca apareció. Incluso hasta el pateador Owen Farrell desperdició muchos puntos, sino la diferencia podría haber sido mayor.

El milagro de la clasificación para darse sería así: Francia debería perder ante Tonga (domingo 6) y ante Inglaterra (viernes 12), ambos sin sumar puntos, y que el miércoles el equipo de Mario Ledesma derrote a Estados Unidos con puntos bonus.

El comienzo fue el típico de un test match, en el cual hay mucho en juego. Ambos equipos jugando táctico, sin arriesgar nada, analizando que ofrece el rival. Y ante la quietud o estudio inglés del partido, llegó la primera jugada de peligro al encuentro. Ese primer golpe fue argentino, a los dos minutos, tras un kick quirúrgico de Benjamín Urdapilleta, que Matías Moroni que mucha decisión y timming ingreso perfecto para tomar la pelota y correr, después el ex Cuba con un rastrón obligó al inglés a ingresar al ingoal y anular. Tras el scrum cinco, llegó la posibilidad para que Los Pumas apoyen su primer try, pero la defensa con indisciplina (ya que había ventaja para Argentina), conspiró contra el ímpetu criollo. La jugada terminó con penal debajo de los palos que Urdapilleta cambió por tres puntos. Sin despeinarse, haciendo lo básico, como correr para adelante y llegar en apoyo, Inglaterra logró responder rápido, sino que pasa al frente, a los 8 minutos, por intermedio del indescifrable Jonny May.

Un buen rato después, más precisamente a los 17, llegó una acción desafortunada y el quiebre del partido. Farrell se agacha un poco al ir ante el tackle de Lavanini, pero el hombro del argentino impacta de lleno en la cabeza del inglés y según recomendaciones de World Rugby, es juego peligroso, por ende expulsión directa. Desde ese momento, Argentina jugó con un hombre menos hasta el final del encuentro.

Con la roja de Lavanini, el partido entró en una meseta, pero con Inglaterra dominando, y Argentina defendiendo y jugando, aunque abusando mucho del uso del pie, para posicionar la acción en campo rival. A los 19, Manu Tuilagi tacklea en el aire a Boffelli, Nigel Owens, el mejor árbitro del mundo, solamente cobra penal. Podría haber amonestado al centro ya que fue peligroso y una amarilla hubiese sido lo correcto, pero las camisetas pesan.

Recién a los 35 minutos llegó el segundo try inglés. Los dirigidos por Eddie Jones movieron la pelota de lado a lado, hasta encontrar el hueco y que sea el fullbcack Elliot Daly quien apoye la conquista. En tiempo cumplido tras percutir con los forwards, como sucedió en 2011, fue Ben Youngs quien a la salida de un ruck engañó a la defensa y apoyó para dejar el 15-3 parcial al entretiempo. Un dato no menor: el infalible pateador Farrell sorprendió al fallar las tres conversiones y un penal factible.

De arranque en el segundo tiempo, el conjunto de la Rosa salió a sentenciar el pleito, y con la facilidad que mostró en los primeros cuarenta minutos llegó al try a los 2 a través George Ford, quien estableció el 22-3. Minutos después una infracción argentina le dio la posibilidad de volver a sumar a los ingleses, que aplicando la practicidad eligieron canjear por tres puntos y estirar la diferencia a 25-3.

El rosarino Jerónimo De la Fuente intenta escapar de la marca inglesa

Los Pumas tardarían casi media hora en poder cruzar la mitad de la cancha con pelota dominada. Los errores se multiplicaban, las decisiones en su gran mayoría fueron las erróneas y el equipo de Ledesma no ligó nunca, pero para ligar hay que estar en positivo y este equipo no lo está. Recién a los 31 y tras una jugada de laboratorio que salió a la perfección, terminó con Tute Moroni volando en el ingoal. Llegó el try del honor para Los Pumas (convertido por Boffelli), que nunca pudieron mostrar sobre el verde césped del Tokio Stadium lo preparado durante la semana.

La Rosa nunca sacó el pie del acelerador y el recién ingresado Jack Nowell apoyó la quinta conquista inglesa (32-10). Aunque para los dirigidos por Eddie Jones el partido no estaba terminado, había tiempo para vos, llegó el sexto try a través del joven Luke Cowan-Dickie, para establecer el 39-10 definitivo. Tras la conquista inglesa hubo un intercambio de “mimos y caricias”, producto de la impotencia del seleccionado argentino de verse superado y no tener respuesta.

Se puede dar el milagro, pero no será fácil. La clasificación ahora depende de lo que hagan otros, más allá del pequeño aporte que deben hacer Los Pumas (ganarle con bonus a Estados Unidos). En 2003 fue la última vez que Argentina se volvió de una cita ecuménica en primera ronda.

Síntesis

Inglaterra (39): Joe Marler, Jamie George y Kyle Sinckler; Maro Itoje y George Kruis; Tom Curry, Sam Underhill y Billy Vunipola; Ben Youngs y George Ford; Jonny May, Owen Farrell (c), Manu Tuilagi y Anthony Watson; Elliot Daly. Entrenador: Eddie Jones.

Argentina (10): Nahuel Tetaz Chaparro, Julián Montoya y Juan Figallo; Guido Petti y Tomás Lavanini; Pablo Matera, Marcos Kremer y Javier Ortega Desio; Tomás Cubelli y Benjamín Urdapilleta; Santiago Carreras, Jerónimo de la Fuente, Matías Orlando y Matías Moroni; Emiliano Boffelli. Entrenador: Mario Ledesma.

TANTOS PT: 6m penal de Urdapilleta (A); 8m try de May (I); 35m try de Daly (I); 42m try de Youngs (I). ST: 2m, 33m y 40m goles de Farrell por tries de Ford, Nowell y Cowan-Dickie (I); 13m penal de Farrell (I); 31m gol de Boffelli por try de Moroni (A).

CAMBIOS I ST: 0m Lewis Ludlam x B. Vinupola, 2m Willi Heinz x Youngs, 14m Courtney Lawes x Kruis, 22m Dan Cole y Mako Vunipola x Sinckler y Marler, 24m Luke Cowan-Dickie x George, 28m Henry Slade, Jack Nowell x Ford y Watson; A ST: 8m Agustín Creevy, Mayco Vivas y Santiago Medrano, Matías Alemanno x Montoya, Tetaz Chaparro, Figallo y Ortega Desio, 14m Tomás Lezana x Petti, 15m Bautista Delguy x Orlando, 18m Felipe Ezcurra x Cubelli y 20m Lucas Mensa x Urdapilleta.

ROJA PT: 17m Lavanini (A).
ÁRBITRO: Nigel Owens (Gales).
CANCHA: Tokio Stadium.
ESPECTADORES: 48185.

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