Ciudad

Coronavirus

Lo que viene en las próximas semanas: la cuarentena intermitente y los bares a cielo abierto

“Para recuperar la actividad económica necesitamos que desde Salud nos indiquen esa posibilidad de ir abriendo nuevamente porque esto son como olas que tenemos de aperturas y de cierres como hemos visto que sucede en otras partes del mundo”, indicó el ministro Roberto Sukerman


 

Bajar la cantidad de contagios y descomprimir el sistema de salud fue una de las premisas que determinó un retroceso de fase en Rosario, donde entre fines de agosto y principio de setiembre se produjeron la mayoría de los contagios. Una ciudad que pasó los primeros cuatro meses de cuarentena casi sin casos y de golpe se encontró con el sistema de salud al borde del colapso. Por eso, la expectativa está puesta en el viernes, cuando termina la etapa de aislamiento, para ver cómo se comportó el virus y si es real que los casos empiezan o no a bajar. Por un lado, el secretario de Salud, Leonardo Caruana, sostuvo que hasta que aparezca la vacuna hay que empezar a pensar en una cuarentena intermitente, es decir abrir y cerrar, descomprimir cuando se complique. En ese contexto, evalúan también las aperturas de comercios. Y fue el ministro de Trabajo, Roberto Sukerman quien sostuvo que cualquier apertura está sujeta al comportamiento de los contagios en la provincia.

Los gastronómicos presionan con una reapertura al estilo Buenos Aires, y en ese sentido el secretario de Desarrollo Económico y Empleo de la Municipalidad de Rosario, Sebastián Chale dijo esta semana que están evaluando cómo volverán las actividades suspendidas. Por ejemplo, la gastronomía tenía un protocolo que contemplaba un factor ocupacional dentro de los salones pero lo que se evalúa ahora son mesas al aire libre y aumentar el espacio público, lo que puede incluir mesas en la vereda y en la calle. Chale aseguró que si bien el aire libre no representa un riesgo cero, es menor que en un lugar cerrado.

Por su parte, el ministro de Trabajo de la provincia, Roberto Sukerman sostuvo que el objetivo es que las ciudades “vuelvan a recuperar su dinamismo”.

Y afirmó que van a tratar de que sea lo más rápido posible. Adelantó que  por ejemplo “queremos que haya más trabajadores en las obras particulares que hoy están en un límite de 5, aprovechar los espacios públicos con distintas cuestiones gastronómicas para poder justamente bajar los riesgos de estar encerrados en un lugar”.

Sin embargo fue claro: la flexibilización de restricciones y el retorno de las actividades está atada a la situación epidemiológica. “Estamos en un momento muy preocupante por el aumento de los contagios, cada día se bate un récord, lo mismo que con la ocupación de las camas”.

“Para recuperar la actividad económica necesitamos que desde Salud nos indiquen esa posibilidad de ir abriendo nuevamente porque esto son como olas que tenemos de aperturas y de cierres como hemos visto que sucede en otras partes del mundo”, indicó el ministro.

 

La idea de Caruana, de abrir y cerrar actividades.

“Todo lo que viene pasando desde fines de agosto, es una complejización de todas las variables sanitarias”, dijo. Y sostuvo que viene observando lo que ocurre en Europa y otros países, y tomando asesoramiento en relación a la complejidad y sus distintos niveles, hasta llegar a la vacuna, donde el camino ya no es la apertura total ni el cierre definitivo. “Todos sugieren cuarentenas intermitentes, de ir y volver; activar rubros, verlos muy bien, y retomar el camino del cuidado. Si en la flexibilización lo hacemos con toda la responsabilidad, posiblemente la etapa de volver a una restricción sea menor, o viceversa”, sostuvo el funcionario

Caruana evaluó que los contagios están en acenso, y que la ocupación de camas ha llegado a estar en el 95 por ciento de ocupación, como el viernes último. Pero aclara que todavía no se sabe hasta adonde treparán los casos, por lo que esperan ansiosos el resultado de los 15 días de encierro.

 

Comentarios