Al menos en las estaciones de servicio de las empresas Shell y Puma de Rosario, las pizarras amanecieron este viernes feriado con nuevos aumentos en el precio de los combustibles, de entre el 15 y el 16%. Las subas suceden a las concretadas días antes, a fin de noviembre, como correlato del último acuerdo de precios, parcialmente respetado, con el Gobierno. De ahora en más, la incertidumbre por las medidas que tomará el próximo Gobierno nacional que asume este domingo. Incertidumbre por devaluación y libertad absoluta para fijar los valores plantan el temor a más, y fuertes, incrementos.
Este viernes, Shell subió el precio del litro de Nafta Super a 461 pesos, la V-Power quedó en 545, la Evolux Diesel pasó a 505 y la V-Power Diesel a 585 pesos.
Puma aumentó el Diesel a 505 pesos, la Ion a 575, la Super trepó a 453 y la Max Premium quedó en 560 pesos.
“Lo teníamos un poco previsto. Antes de la asunción del nuevo gobierno iba a haber un promedio de aumento entre un 20 y un 25 por ciento. Evidentemente, se está cumpliendo porque el 28 del mes pasado hubo un aumento de entre un 10 y un 12 por ciento y hoy estamos hablando de un 15 más”, dijo Daniel Giribone, referente de la Cámara de Estaciones de Servicios de Rosario (Cesgar).
El referente empresario señaló que el sector venía “aguantando hasta ahora con esta diferencia” y que hay muchas estaciones de servicio que están trabajando por debajo de sus “puntos de equilibrio”.
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