César Julio Carlos Domínguez se ganaba la vida cuidando autos en La Fluvial. La noche de su muerte, lo pasó a buscar una moto con dos muchachos. Poco después apareció tirado en el camino viejo a Soldini con cinco disparos calibre 9 milímetros. En ese mismo mes, marzo de 2016, después de una discusión Ricardo Herrera fue baleado cuando llegaba a su casa. Estos dos homicidios cometidos en la zona sudoeste fueron reconocidos por Jonatan Gabriel Muñoz a través de un acuerdo abreviado. Los fiscales Rafael Coria y Ademar Bianchini llegaron a un convenio con la defensa del muchacho, quien aceptó una condena a 18 años de cárcel.
El 6 de marzo de 2016 César Domínguez iba a trabajar frente a La Fluvial. Lo pasó a buscar una moto con dos muchachos, luego identificados como Jonatan Muñoz y su cuñado Alexis M. Su cuerpo apareció en zona sudoeste, el camino viejo a Soldini y San Juan de Luz, frente a un descampado: tenía cinco tiros gatillados con una 9 milímetros. Según reconstruyó la pesquisa, Domínguez, quien era primo de Muñoz, iba sentado en el medio. En un momento Alexis M. le cortó el cuello y la víctima cayó de la moto. Entonces Muñoz le disparó en 5 oportunidades, dijo el fiscal Bianchini.
A fines de marzo la novia de Muñoz fue detenida en un destacamento de barrio Las Flores: era una suboficial de la Policía Comunitaria. Sospechan que el arma utilizada en el crimen era de la uniformada. En ese momento también detuvieron a Muñoz cuando un policía lo reconoció entre los curiosos que asistían al arresto de la efectiva. Horas después el otro sospechoso, hermano de la mujer policía, fue detenido en su casa.
Cuatro días antes de caer detenido, Muñoz baleó a Ricardo Herrera, conocido como Chichín. Eran cerca de las 20.30 del 27 de marzo de 2016 cuando Muñoz discutió con Chichín. El hombre no quiso dejar las cosas así. Tomó un arma y se fue hasta la casa de la víctima. Cuando Herrera iba llegando a la vivienda, ubicada en San Juan de Luz al 8300, le efectuó varios disparos. Tres de los proyectiles impactaron en la víctima, explicó el fiscal. Luego se dirigió a la casa de la madre de Herrera a decirle que le había disparado a Chichín: “No quiero a la yuta, no quiero a la yuta, porque te mato un hijo”, le dijo.
Por ambos casos, los fiscales Coria y Bianchini acordaron con el defensor Nelson Flores la responsabilidad de Muñoz y coincidieron en una condena a 18 años de cárcel. Planteo consentido por el imputado ante el tribunal compuesto por Gustavo Pérez de Urrechu. Alejandro Negroni y Raquel Cosgaya, quienes luego de un cuarto intermedio homologaron el acuerdo, en una audiencia celebrada este viernes.
