Policiales

Zona norte

Lo acusan de querer robar a un vecino y balear a su compadre

Un conflicto vecinal con dos versiones tuvo como corolario un herido de arma de fuego. La Fiscalía acusó a un hombre de 28 años de intentar robar a un vecino y balear a su amigo en un hecho posterior. El sospechoso aseguró que el vecino que lo acusa de robo fue quien disparó


El fiscal Schiappa Pietra lo acusó por el delito de homicidio simple y solicitó 20 años de prisión.

Turu vive en la zona norte y es vecino de Brian. Los separa sólo una cuadra. El viernes a la tarde Brian lo acusó de intentar robar su moto e ingresar con otros cuatro muchachos a su casa con armas y amedrentarlo para que se vaya. También lo acusó de balear a su compadre, pero Turu dijo que las cosas no pasaron como los contó su vecino. Estaba con su compadre en la puerta de su casa y el que salió armado y disparó fue el vecino. Su compadre sigue internado y aún pudo contar su parte para aclarar el asunto. En cambio algunos testigos apuntaron a Turu como el autor de ambos hechos. El juez interviniente aceptó la imputación de tentativa de homicidio, tentativa de robo calificado y portación. Dispuso la prisión preventiva de Turu hasta el 6 de julio, el último día hábil antes de la feria judicial.

Según la imputación del fiscal Luis Schiappa Pietra, en Bouchard al 3400 había cinco muchachos. Brian M. pasó en moto y  lo pararon. Le dijeron que le entregara la moto y le sacaron la gorrita. El motociclista aceleró y entró a su casa. Dijo que el grupo se metió por los fondos de la propiedad. Estaban armados y lo amenazaron para que se vaya. El hecho paso la tarde del viernes, pero el episodio no terminó allí. Tucu y su compadre Gustavo P., que según los testigos estaban en el grupo de los cinco, discutieron y Turu le pegó un tiro en el abdomen, explicó el funcionario.

Un vecino llevó a Gustavo en su auto hasta el hospital Alberdi dónde permanece internado y aún no se encuentra en condiciones de declarar. Schiappa Pietra lo acusó por los dos hechos. Pero Turu, identificado como Lisandro Nicolás M., de 28 años, contó su versión. Dijo que estaba en la puerta de su casa en Caracas al 2600, pasó Brian M., a quien dijo conocer de vista y no saber su nombre y lo amenazo. Turu estaba con su compadre Gustavo P.  y sus dos hijos. Contó que Brian entró a su casa y salió con dos armas de fuego, uno en cada mano y le tiró a su compadre. Para defenderlo, Turu le tiró un ladrillazo que le pegó a Brian en la cabeza.

El defensor Andrés Cal –acompañado por su par Maximiliano Special– dijo que hay una confusión en los hechos y resaltó contradicciones en los testimonios de algunos vecinos, incluso marcó contradicciones entre los dichos que Brian M. le dio a la Policía que llegó al lugar y los que brindó en Fiscalía.

Pero el fiscal siguió firme en su teoría del caso, aseguró que hay personas que lo vieron armado y en una situación intimidatoria. Aseguró que la víctima del robo, Brian R. entró herido al hospital Alberdi y en su relató aseguró que Turu junto a Gustavo P. y otras personas, todas armadas, intentaron robarle la moto y hubo una gresca. Entró a su casa y se le metieron por el fondo.

Tras un llamado al 911 alertando sobre un robo, llegó la Policía y vio el grupo de muchachos. Uno de ellos descartó algo, luego la Policía determinó que era un arma que fue secuestrada. Era calibre 38 plateada con cuatro balas  intactas y dos percutidas. El fiscal sumó declaraciones que sindican a Turu como el tirador de Gustavo P., lo que sucedió a una cuadra en una cancha de fútbol, según apuntó la Fiscalía. Los declarantes afirmaron que los compadres se desconocieron.  El fiscal resaltó la declaración de una mujer quién aseguró ver a Turu disparar y antes de la audiencia, declaró en Fiscalía, esta vez dijo que se lo habían contado y sembró un manto de duda en relación al cambio de testimonio.

Aún resta confirmar otras declaraciones en sede judicial, fundamentalmente los dichos de la víctima de la tentativa de homicidio. Schiappa Piertra pidió el dictado de la prisión preventiva sin plazo. La defensa se opuso, remarcó contradicciones en la evidencia y pidió la libertad, subsidiariamente una alternativa a la prisión y en el último de los casos una restricción a la prisión efectiva. Esta última opción fue la que el juez Carlos Leiva aceptó. Dispuso la prisión preventiva del imputado hasta el 6 de julio y para el caso que Gustavo P. declare antes, dejó abierta la opción que se pida una nueva audiencia.

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