Ezequiel Nieva
El gobernador Miguel Lifschitz hizo un pormenorizado análisis de la situación económica de la provincia y reafirmó su decisión de “priorizar el gasto social” y “garantizar las necesidades básicas a los santafesinos” ante la seguidilla de recortes presupuestarios por parte del gobierno nacional. Además, el mandatario volvió a pedir que se declare la emergencia alimentaria a nivel nacional, tal como reclaman los sindicatos, las organizaciones sociales y el arco político opositor.
El mandatario dio una conferencia de prensa este lunes en la Casa Gris junto a los ministros de Desarrollo Social, Jorge Álvarez; Educación, Claudia Balagué; Salud, Andrea Uboldi; Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías; y Economía, Gonzalo Saglione. En ese marco, Lifschitz reclamó una vez más que el gobierno nacional declare la emergencia alimentaria “no como una expresión retórica, sino concreta y real”.
“Necesitamos que el gobierno nacional se haga cargo de la crisis económica y social que ha generado y que envíe recursos en forma urgente a las provincias, que no son más que los recursos que está obligado a enviar y que viene retaceando en los últimos tiempos”, exigió el mandatario santafesino. “Estamos en una situación crítica que no comenzó a partir de las Paso, como intentan hacernos creer, sino dos años antes”.
En ese sentido, Lifschitz recordó que “el año pasado advertimos cómo el gobierno nacional retaceaba los fondos que enviaban a las provincias para apoyar el gasto social en desarrollo social, salud y educación pública”.
Como contrapartida, enumeró la inversión social que hizo la provincia (ver aparte), cuyos montos se ubicaron por encima de la inflación: “Garantizamos llegar con nuestras propias finanzas al final de nuestra gestión cubriendo las políticas sociales que son características de Santa Fe y que en tiempos de crisis son más necesarias que nunca”.
Lifschitz también mencionó la aplicación de la cláusula gatillo 2a todos los trabajadores del sector público”, otro de los motivos por los cuales aumentó el gasto corriente en la provincia. Sobre ese punto, precisamente, gira la más reciente discusión entre el gobierno actual y el equipo del mandatario electo Omar Perotti, que la semana pasada hizo hincapié en el que el gasto en la provincia sube por encima de la recaudación.
Los recortes
Durante la conferencia, el gobernador remarcó los recortes realizados por la Nación en materia de salud –traslado de personas discapacitadas, tratamientos de diálisis, drogas oncológicas, bajas de prestaciones de PAMI–, educación –comedores y copas de leche–, tarifas sociales y transporte público. Esos recortes fueron cubiertos con fondos provinciales. Pero además indicó que la quita del IVA a los alimentos y las modificaciones en el impuesto a las Ganancias tendrán impacto negativo sobre las cuentas provinciales, lo que agravará la situación fiscal de la provincia.
Según Lifschitz, la situación “se agudizó a fines del año pasado, con la decisión del gobierno de eliminar la cobertura de la tarifa social eléctrica, lo cual representó para la provincia de Santa Fe una suma de 1300 millones de pesos adicionales, que ya incluimos en el presupuesto de este año; la eliminación de subsidios al transporte urbano e interurbano, que significó otros 1500 millones de pesos, refuerzo que el gobierno de la provincia tuvo que asumir; la eliminación de los aportes y de la cobertura para distintos tipos de servicio de alto costo en materia de salud, por ejemplo el traslado de personas discapacitadas, los tratamientos de diálisis, las drogas oncológicas y otras de alto costo para tratamientos específicos, todo lo cual representó también un refuerzo para este año de más de 500 millones de pesos en el sistema de salud; el congelamiento del aporte, desde hace bastante tiempo, para los comedores escolares, lo cual hace que en la actualidad estemos invirtiendo más de 5000 millones de pesos de los recursos de la provincia para sostener todo el sistema de copas de leche y comedores escolares y de eso recibamos solamente el 2% de aportes nacionales”.
En esa línea, sostuvo que “la última devaluación y las medidas anunciadas en materia tributaria por el gobierno nacional han puesto en situación de crisis a todos los sectores de la sociedad y también a las finanzas de los gobiernos provinciales y municipales”.
“Las medidas tributarias representan casi 4000 millones de pesos menos en estos casi cuatro meses para el gobierno provincial, por la elevación de los pisos de Ganancias y por la eliminación del IVA en los alimentos. También la devaluación ha elevado los índices inflacionarios, lo que tiene un enorme impacto sobre los costos que debe afrontar la provincia: insumos médicos, costos salariales, insumos de la obrar pública, entre otros”, enumeró.
A ese panorama, Lifschitz agregó que “las instituciones sociales comenzaron a pedir ampliación de partidas para atender sus comedores y los clubes de barrio entraron en situación de crisis por el aumento de las tarifas”. Esa situación se registra en toda la provincia, pero se nota más en los grandes conglomerados urbanos.
El “gasto” social
Lifschitz y sus ministros dieron detalles acerca de la inversión social que realiza la provincia:
– 500 millones de pesos (20% por encima del presupuesto) para cubrir gastos del sistema de salud: transporte de personas con discapacidad, medicación oncológica, atención de pacientes con diálisis, leche para los centros de salud, preservativos y anticonceptivos.
– Siete de cada diez santafesinos se atienen en el sistema público de salud y solo en la ciudad de Rosario se registran siete historias clínicas nuevas por semana.
– Programa Nueva Oportunidad: de 7500 participantes que había en 2017 hoy son 17.800. Implica un presupuesto mensual de 50 millones de pesos.
– Santa Fe Juega: en 2017 participaron 168 mil deportistas; este año, más de 200 mil. El programa requiere una inversión de 100 millones de pesos.
– Tarifas para clubes: se invirtieron 70 millones de pesos para subsidiar la energía eléctrica y el gas de 102 clubes de toda la provincia.
– El presupuesto del área de Niñez pasó de 300 millones de pesos en 2017 a más de 600 millones este año.
– De 2018 a 2019 se sumaron 21.432 alumnos que asisten a la copa de leche en las escuelas de la provincia. En total, el 51% de los estudiantes (casi 450 mil en toda la provincia) desayunan o meriendan en sus escuelas y 150 mil (20%) almuerzan en los comedores escolares. La inversión nacional en este rubro representa apenas el 2% del gasto total.
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